ASUNCIÓN, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente paraguayo, Fernando Lugo, aseguró este miércoles que ha terminado "un capítulo" en su lucha contra el cáncer linfático, al recibir el alta médica de un hospital en Brasil donde se sometió a su sexta y última sesión de quimioterapia.
El equipo médico que atiende al mandatario anunció este martes que los tumores que le fueron detectados hace más de tres meses han desaparecido "totalmente", aunque deberá continuar con un tratamiento y someterse a exámenes de seguimiento.
"Termina un capítulo en la enfermedad del presidente de Paraguay, un capítulo que nos ha llevado algunos meses", aseveró Lugo en declaraciones a la prensa a su salida del Hospital Sirio Libanés, en Sao Paolo.
Lugo explicó que "habrá una época de seguimiento de la enfermedad" mediante un "control bimensual" para determinar "si puede haber rebrotes o no" del cáncer linfático no hodgkins que le fue detectado el pasado mes de agosto.
Se espera que Lugo llegue en un vuelo comercial a Asunción alrededor de las 17.00 horas (21.00 horas en la España peninsular) para dar un mensaje a la nación desde el aeropuerto, informó la Presidencia de Paraguay en un comunicado.
Por su parte, el jefe del equipo médico presidencial, Alfredo Boccia, informó de que el ex obispo católico recibirá un tratamiento médico de 5 días con corticoides y otros medicamentos. "A esto, seguirá un período de 4 a 6 días de disminución de las defensas, con las restricciones que ya todos conocen", explicó.
"Posteriormente, entrará en la etapa de recuperación de las defensas, y podemos decir que el tratamiento quimioterápico terminaría el 9 de diciembre, aproximadamente", agregó Boccia, citado por la Presidencia.
Lugo, de 59 años, fue sometido a un total de seis quimioterapias para combatir el cáncer no hodgkin en estado avanzado que le fue diagnosticado a comienzos de agosto, sin que esto haya afectado su agenda de actividades, a pesar de las presiones de la oposición para que renuncie.
TRATAMIENTOS EN PARAGUAY
El ex obispo católico, por otra parte, expresó su deseo de que los casos de cáncer puedan ser tratados en Paraguay. "Ese es el desafío y el deseo de un compromiso de ir implementando esto", indicó el mandatario.
Lugo recibió la mayoría de sus quimioterapias en el Hospital Sirio Libanés de Sao Paulo, uno de los centros médicos especializados más famosos de Sudamérica en el que han sido tratadas importantes personalidades como la presidenta electa de Brasil, Dilma Rousseff.
El hecho de que el presidente paraguayo optara por hospitales internacionales en vez de recibir atención médica en su país fue cuestionado, especialmente, por la oposición que aprovechó la ocasión para cuestionar las políticas de su Gobierno en materia de salud.
Lugo reiteró que el "desafío" es comenzar a implementar en Paraguay un sistema de salud de calidad para el tratamiento de este tipo de enfermedades.
"Quizás no vamos a llegar al nivel que han llegado los países como Brasil y Estados Unidos, verdad, pero yo creo que Paraguay tiene que asumir de que mucha gente en este mal va a tener las posibilidades reales de pasar por la atención que he pasado yo", afirmó.