Actualizado 22/06/2012 00:14

Paraguay.- La Unasur enviará una delegación de cancilleres a Paraguay para analizar la crisis política


RÍO DE JANEIRO, 21 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) enviará a Paraguay una delegación de ministros de Exteriores de países miembros del bloque para analizar la crisis que se ha desatado a raíz del juicio político que se realizará contra el presidente Fernando Lugo, por una masacre ocurrida en el sureste del país hace una semana.

Así lo ha informado en la ciudad brasileña de Río de Janeiro el secretario general de la Unasur, el venezolano Alí Rodríguez Araque, una vez concluida la reunión convocada con carácter de urgencia entre los cancilleres de ese organismo en la que debatieron la situación de Paraguay.

"La misión es contribuir en todo lo que se pueda a encontrar una solución a la situación que allí está planteada", ha explicado Rodríguez Araque en una rueda de prensa, al revelar que principal preocupación de los países miembro del bloque es que se respete la Constitución y se garantice el derecho a la defensa de Lugo.

La delegación "respetará las decisiones de Paraguay" porque "son de carácter soberano", pero "una vez que concluyan los procesos emitiremos una opinión, mientras tanto sería precipitado hacerlo", ha dicho Rodríguez Araque.

"Desde primera hora hemos tenido comunicación con el presidente Lugo", ha revelado el secretario general, sin precisar detalles de los asuntos abordados con el exobispo católico.

La Unasur, creada en 2008, está conformada por Ecuador, Perú, Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Colombia, Guyana, Paraguay, Surinam, Uruguay y Venezuela, y se espera que cada país miembro envíe a su ministro de Exteriores.

La Cámara de Diputados de Paraguay resolvió este jueves realizar un juicio político contra Lugo por los disturbios ocurridos la semana pasada en la localidad de Curuguaty, ubicada en el departamento de Canindeyú (sureste), donde once campesinos y seis policías murieron en enfrentamientos durante un desalojo.

Lugo ha confirmado que se someterá a ese juicio, pero ha dejado claro que no dimitirá porque considera que "no existe ninguna causa valedera, ni jurídica ni política", que le obligue a separarse del cargo para el que fue electo hace cuatro años.