LIMA, 3 Ene. (EUROPA PRESS) -
Abraham Carrasco Talavera, nuevo alcalde del Chilca, en la provincia peruana de Huancayo (sur), recibió varios golpes en el cuerpo después prestar juramento como un recordatorio de que no podrá olvidar sus promesas electorales en favor de la comunidad.
Carrasco, de 23 años, recibió este domingo tres azotes por parte del que es considerado el ciudadano más respetable de la ciudad, Cupertino Sáenz, como parte de la ceremonia de investidura que se llevó a cabo en un parque de Chilca, frente a decenas de personas.
Sáenz propinó los azotes mientras pronunciaba en lengua indígena quechua las frases: "No serás ocioso, no serás mentiroso, no serás ladrón", informaron este lunes medios locales.
Al finalizar el acto, Carrasco besó la mano de Sáenz en señal de respeto y dijo: "Por el distrito de Chilca, que amo de sobremanera, lo llevo en mi corazón y por este pueblo que confió en mí, juro que trabajaré por su desarrollo".