Actualizado 13/04/2012 09:56

Perú.- La Defensoría del Pueblo de Cuzco dice que son 38 los trabajadores secuestrados por Sendero Luminoso


LIMA, 13 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Defensoría del Pueblo de la región de Cuzco, ubicada en el sur de Perú, ha asegurado este jueves que son 38 los trabajadores de la industria del gas secuestrados por Sendero Luminoso, según informa Radio Programas de Perú (RPP).

El defensor del pueblo de Cuzco, Silvio Campana, ha explicado que en un principio la guerrilla secuestró a 41 trabajadores, pero que después liberó a un conductor, un médico y una enfermera, que se habrían encargado de entregar a las autoridades una nota con las demandas del grupo armado.

"La información que existe hasta el momento es que (los guerrilleros) habrían dividido (a los trabajadores secuestrados) en dos grupos. Un grupo se perdió en la espesura del monte en la zona de Alto Kepashiato y el otro en un lugar distinto", ha dicho Campana.

Ayer, el fiscal coordinador de la provincia de La Convención, Raúl Luque Machaca, elevó a 42 el número de trabajadores, después de que la alcaldesa de La Convención, Fedia Castro, apuntara que eran 40, a pesar de que en un principio el gobernador de Cuzco, Roberto Rojas Oviedo, habló de 30.

Además, Campana ha instado a las autoridades y a los 1.500 miembros de las fuerzas de seguridad que participan en el operativo de búsqueda a hacer todos los esfuerzos necesarios para rescatar "sanos y salvos" a los trabajadores.

"Las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional en este comando unificado deben desarrollar las acciones de Inteligencia necesarias que garanticen cualquier intervención salvaguardando la vida de los rehenes", ha subrayado.

Los trabajadores, subcontratados por la Transportadora de Gas de Perú (TGP) para el proyecto Camisea, fueron capturados en la madrugada del lunes durante una incursión de Sendero Luminoso en el municipio de Kepashiato, ubicado en el Valle de los Ríos Apurímac y Ene (VRAE), donde el grupo armado tiene remanentes muy activos.

Sendero Luminoso amenazó con recrudecer sus acciones tras la captura el pasado mes de febrero de su máximo jefe, Florindo Eleuterio Flores Hala, alias 'Camarada Artemio', lo que obligó al Gobierno de Ollanta Humala a reforzar los operativos en algunas regiones, especialmente, en el VRAE.