Actualizado 17/12/2013 21:45

La hija de Fujimori dice que su padre está estable y que asistirá al juicio

El expresidente de Perú Alberto Fujimori
Foto: REUTERS

LIMA, 19 Oct. (EUROPA PRESS) -

   La excandidata presidencial Keiko Fujimori ha asegurado que su padre, el expresidente Alberto Fujimori, se encuentra estable y se le ha diagnosticado una "cardiopatía hipertensiva", tras visitarle este sábado por la mañana a la clínica Centenario, en Pueblo Libre, Lima.

   Del mismo modo, Keiko negó las declaraciones del jefe del Instituto Nacional Penitenciario Estatal de Perú (INPE), Luis Pérez Guadalupe, quien este viernes señaló que Fujimori ingresó en este centro de salud para una evaluación programada.

   Según la hija del expresidente, si bien este último tenía evaluaciones previstas, su ingreso a la clínica se precipitó por "la crisis de hipertensión que presentó en el juicio por el 'caso diarios chicha'", juicio al que seguirá asistiendo cuando se reanude el próximo 28 de octubre, según Keiko.

   En cuanto al estado de salud de su padre, la excandidata presidencial informó a la prensa que este mismo sábado se le practicó un ecocardiograma y un mapeo vascular, cuyos resultados se le entregarán esta tarde. Precisó, además, que "su hipertensión está más estable" y que debe salir de alta mañana, según informa el diario peruano 'El Comercio'.

   Al ser preguntada en referencia a las críticas contra el exmandatario por presuntamente armar un espectáculo mediático al aparecer demacrado en el juicio, Keiko afirmó que los signos médicos son irrebatibles.

   Horas antes, el presidente de Perú, Ollanta Humala, declaró que "cada uno es libre de trazar la estrategia, sea mediática, sea en el mismo proceso, para defender sus propios intereses".

   Alberto Fujimori gobernó Perú entre 1990 y 2000, y ahora se encuentra cumpliendo condena de 25 años de cárcel por crímenes de lesa humanidad y delitos de corrupción cometidos bajo su mandato. En la actualidad, debe hacer frente al llamado 'caso diarios chicha', un juicio por el que está acusado de desviar recursos públicos de las Fuerzas Armadas con el fin de sobornar y comprar a directivos de distintos diarios sensacionalistas del país para lanzar campañas de desprestigio contra los opositores a su gobierno.