Actualizado 25/06/2011 23:25

Miles de manifestantes contrarios a la minería toman el aeropuerto de Juliaca


LIMA, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -

Unos 3.000 manifestantes contrarios a los proyectos mineros han tomado este sábado el aeropuerto Inca Manco Cápac de Juliaca, en la región de Puno, y amenazan con hacerse con la torre de control después de que ayer murieran seis personas en los enfrentamientos entre los manfiestantes, principalmente indios aimara, y la Policía.

Precisamente las fuerzas de seguridad se han replegado para evitar nuevos enfrentamientos, ha explicado el general de la Policía Herbert Rosas. Algunas viviendas colindantes con el aeropuerto habrían sido invadidas y saqueadas por algunas personas, según ha informado Perú21.

Mientras, el presidente en funciones, Alan García, ha deplorado la violencia registrada y manifestó que su administración buscará garantizar el inicio del gobierno de Humala en un clima de calma, serenidad política y sin presiones.

García atribuyó las protestas a "oscuros intereses políticos" que exigen apropiarse una parte del poder con el cambio de gobierno y presionar al nuevo mandatario. "La voluntad del gobierno es facilitar lo máximo posible el inicio en calma y la serenidad política para el comienzo del gobierno del presidente Humala", dijo.

Explicó que por esa razón se adoptaron decisiones legales, referidas a la suspensión de algunos proyectos mineros en esa zona del país, "pese a que algunas personas no las comprendan".

"Hay intereses superiores, de tránsito democrático y de cambio de gobierno que exigen que tomemos decisiones para que el gobernante no sea presionado, como se le quisiera presionar", argumentó.

También el presidente electo, Ollanta Humala, ha instado a los manifestantes a deponer los actos de violencia y pidió al Gobierno central y a las autoridades de la región una pronta solución a este conflicto.

"Invoco al gobierno central y a los líderes de Puno a que depongan las acciones violentas y busquen una solución pacífica a los problemas a través del diálogo y la concertación", ha afirmado este sábado Humala, quien lamentó la pérdida de vidas y el "derramamiento de sangre" como consecuencia de la violencia.