LIMA, 8, (EUROPA PRESS)
El presidente peruano, Ollanta Humala, ha obtenido el pero resultado de respaldo desde el comienzo de su mandato en 2011, al caer por debajo del 40 por ciento en la aprobación.
La aprobación del presidente Ollanta Humala se sitúa por primera vez en el punto más bajo de su gestión, al llegar a un 39 por ciento, siete puntos menos que el mes anterior, según un estudio realizado por Pulso Perú y que recoge 'Perú21'.
Sin embargo tomando como referencia el mes de abril, la caída que se gestión representa ha sido dramática, pues ha perdido 21 puntos en solo 4 meses de medición.
El estudio indica que entre los factores asociados a la baja de aprobación, se encuentran la desconfianza empresarial, y del país en general, a raíz de poner en agenda temas como la nacionalización de los activos de Repsol, el decrecimiento de la economía y la cuestión de si su mujer, Nadine Heredia, podría presentarse a las elecciones presidenciales de 2016.
De igual modo inciden en la desconfianza de la gestión del mandatario la caída espectacular de las expectativas económicas familiares, puesto que en junio, el 45 por ciento de la gente pensaba que su economía iba a estar mejor dentro de un año; en cambio ahora solo el 34 por ciento piensa así.
INCREMENTO DE LA DESCONFIANZA
En torno a la desconfianza hacia el presidente Humala, ésta también se ha incrementado, ya que entre quienes confían poco y nada en el mandatario suman un 81 por ciento, mientras el mes pasado esa cifra era de 69 por ciento. Asimismo, el estudio indica que cada vez más personas tienen poca esperanza de que Perú estará mejor al terminar el gobierno de Humala, según destacan los datos.
Por otra parte, en el estudio se ha abordado otro tema de envergadura, concerniente a la investigación de los 'narcoindultos', que relacionan al expresidente Alan García, donde el 71 por ciento cree que él sí tenía conocimiento de las conmutaciones a cambio de dinero.
En una encuesta anterior de Datum, más del 80 por ciento pensaba que García sí había tenido participación en los actos de corrupción denunciados en su gobierno, lo cual refleja el alto grado de percepción negativa hacia su gestión.