Actualizado 08/03/2011 14:38

Piñera: Los países latinos siguen dos caminos pero uno no lleva "a ninguna parte"

El presidente de Chile, Sebastián Piñera
EUROPA PRESS/PRESIDENCIA DE CHILE


MADRID, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Chile, Sebastián Piñera, ha afirmado que los países de América Latina tienen "dos visiones" que siguen dos "caminos" distintos, uno que "no conduce a ninguna parte" y otro que lleva "al desarrollo, la democracia y la paz" y que es el que está siguiendo Chile.

Según Piñera, la primera de esas visiones la tienen países como "la Cuba de (Raúl) Castro o la Venezuela de (Hugo) Chávez", mientras que la segunda está representada por naciones como "la Colombia de (Juan Manuel) Santos, el Perú de (Alan) García" o el propio Chile.

Durante su intervención en el Foro de la Nueva Economía en Madrid, el presidente chileno ha indicado que "para descubrir cuál es el camino correcto y cuál es el camino equivocado no tenemos que enfrascarnos en grandes discusiones idelógicas", sino ver "qué países lo están haciendo bien, (...) qué países llevan la delantera".

Aunque "cada país tiene derecho a buscar su propio camino", debe hacerlo "respetando los derechos humanos y la democracia, que son valores que no tienen fronteras", ha subrayado.

En su opinión, "los resultados se están mostrando con meridiana claridad", porque "hay un camino que es mejor, que conduce al desarrollo, a fortalecer la democracia, a la paz, y otro que (...) no conduce a ninguna parte".

LIBERTAD POLÍTICA, ECONÓMICA Y SOCIAL

Además de la libertad política, que es la "democracia plena", Piñera ha defendido la libertad económica, que para él equivale a una "economía de mercado libre, abierta y competitiva", y la libertad social, que significa, a su juicio, acabar con la pobreza y alcanzar la igualdad de oportunidades.

Piñera ha lamentado que "América Latina no haya estado a la altura de sus oportunidades en sus primeros 200 años" de independencia y que las noticias sobre el subcontinente hayan hecho referencia sobre todo a temas como golpes de Estado, terrorismo o desastres naturales.

Pero "éste es el siglo de América Latina", ha dicho el mandatario chileno, que se ha mostrado convencido de que al final los países de la región "van a converger" hacia "la libertad plena, la democracia, la economía de mercado y la igualdad de oportunidades".

OBJETIVO DE SU GOBIERNO

Piñera, que sucedió a Michelle Bachelet en la Presidencia de Chile en marzo de 2010, ha destacado que el objetivo principal de su Gobierno es convertir Chile, antes de que termine esta década, en el primer país latinoamericano que haya logrado ser "un país desarrollado, sin pobreza", que "dé oportunidades a todos sus hijos" de tener "una vida más plena y feliz" y en el que se viva en paz y con libertad.

El dirigente ha reconocido que es una meta "ambiciosa pero factible" y ha añadido que para alcanzarla su Gobierno debe fortalecer los pilares antiguos pero también los nuevos.

A su entender, debe haber una democracia "estable y legítima", una economía de mercado "libre, abierta y competitiva" y un "Estado eficaz" con "menos grasa y más músculo" que luche contra la pobreza, ofrezca igualdad de oportunidades, proteja el medio ambiente y combata la delincuencia y el narcotráfico, entre otras cosas.

Al mismo tiempo, ha agregado, hay que avanzar en los ámbitos de la educación, la ciencia y la tecnología y la innovación y el emprendimiento. Aquí se presentan unas "barreras" que "vamos a tener que conquistar", ha señalado.

RECUPERAR LA CAPACIDAD DE CRECIMIENTO

Piñera ha hecho especial hincapié en el objetivo de "recuperar la capacidad de crecimiento de Chile", que "se ha ido perdiendo" en los últimos años. Concretamente, ha precisado, su Ejecutivo aspira a que la economía crezca a un ritmo del 6 por ciento anual, que es que necesita el país "para alcanzar el desarrollo", y a crear un millón de nuevos empleos en un plazo de cuatro años.

En este contexto, ha asegurado que, a pesar del devastador terremoto de febrero de 2010, que hizo perder a Chile "casi un quinto de su PIB", esos objetivos económicos "no son solo promesas", ya que durante el primer año de su Gobierno ya se han podido constatar "realidades".

INVERSORES ESPAÑOLES

Por último, Piñera se ha dirigido a los inversores españoles, que son "bienvenidos en Chile", donde reciben "un trato igualitario y amigable". El presidente ha recordado que España es el segundo inversor extranjero en Chile, solo superado por Estados Unidos.

"Nos gustaría ver más inversión española en nuestro país", y no solo con recursos financieros, sino especialmente en sectores como los de "las energías renovables, la desalinización del agua, la educación o la innovación y el emprendimiento", ha declarado.

Piñera ha insistido en que "los empresarios españoles pueden confiar" en el "Estado de Derecho" en Chile porque su Gobierno considera que "parte del desarrollo y la democracia" es tener "un Estado que dé garantías", en el sentido de que ofrezca igualdad de oportunidades y fomente el respeto de la propiedad privada.