SANTIAGO, 17 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, propuso este viernes instalar "la próxima semana" una mesa de diálogo para solucionar el conflicto con los 34 presos mapuches que desde hace dos meses permanecen en huelga de hambre para exigir la derogación de la Ley Antiterrorista, un vestigio de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) que permite juzgar a los indígenas por el código militar en lugar del civil.
"La próxima semana, apenas terminen las celebraciones del Bicentenario, se realizará una mesa de diálogo en el cerro Ñielol de Temuco (capital de la región de Araucanía) que deberá entregar soluciones para acabar con la huelga de hambre indígena y el conflicto en general, antes que termine el año", dijo Piñera durante la izada de la bandera nacional en la Plaza de la Ciudadanía de la capital y ante la presencia de los ex presidentes Patricio Aylwin, Eduardo Frei, Ricardo Lagos y Michelle Bachelet.
La mesa estará integrada por el ministro de la Presidencia, Cristian Larroulet, y de Planificación, Felipe Kast, como portavoces del Gobierno, así como por representantes de las comunidades mapuches, las iglesias Católica y Evangélica y diversas organizaciones civiles que tratarán de convencer a los reos de que depongan el ayuno y ofrecer soluciones al conflicto indígena "antes de finales de año".
De forma paralela, el mandatario anunció la puesta en marcha del Plan Araucanía, región donde se concentra la mayoría de la población indígena, una iniciativa que calificó de "potente" y ambiciosa" y que tiene por objetivo "mejorar la calidad de vida y oportunidades de desarrollo del pueblo mapuche y generar un reencuentro histórico para valorar su identidad, idioma, costumbres y cultura" comp parte de la identidad chilena.