Actualizado 30/03/2017 10:03

La Policía boliviana ha sido acusada de usar armas de fuego el día de la muerte de Illanes

   SUCRE, 31 Oct. (Notimérica) -

   Varios testimonios incluidos en un informe del defensor del pueblo de Bolivia, David Tezanos Pinto, han afirmado que se usaron armas de fuego, entre ellas ametralladoras, contra los mineros el pasado 25 de agosto, día del asesinato del viceministro de Interior, Rodolfo Illanes en la localidad de Panduro.

   En la última declaración, Tezanos señaló a siete jefes de policías de haber portado armas, por lo que la Policía y el Gobierno instaron al defensor del pueblo a aportar pruebas sobre estas declaraciones, para lo que ha sido citado este lunes a las 15:00 (hora local) por la Fiscalía de la Paz.

   En este informe, Tezanos menciona como indicios del uso de armas de fuego "los antecedentes de víctimas por impactos de bala, los resultados de las autopsias, la recepción de un par de casquillos 9 milímetros en la localidad de Panduro, los testimonios de mineros de Viloco, que refieren que hubo ráfaga y el informe médico sobre la atención a heridos en el Centro de Salud Eucaliptus".

   El informe también incluye como argumentos "el testimonio de personal de la Policía Boliviana que refiere la utilización de la pistola-ametralladora STAR Z-70, que dispara munición de 9 milímetros de calibre. (...) Sin embargo, el Comando Departamental de La Paz de la Policía Boliviana (...) negó que hubiera habido fuerzas especiales en el lugar del conflicto".

   Tezanos apoya su comunicado sobre la utilización indebida de armas de fuego afirmando que existen imágenes en cadenas de televisión sobre estos hechos que muestran la presencia de la unidad Delta y de la Unidad Táctica de Operaciones-UTOP, ambas pertenecientes a la Policía boliviana.

   El documento también explica cómo el ministro de Gobierno, Carlos Romero, en un encuentro previo al 25 de agosto, fue informado sobre la situación de Panduro, respondiendo que "contaba con un plan de rescate, y que determinaría el repliegue de la Policía, enfatizando que había prohibición de uso de armas letales".

   El día de los hechos, según indica el informe, el defensor del pueblo "instó públicamente al repliegue de la Policía para evitar un posible enfrenamiento, precautelando la vida y la integridad física del viceministro", según incluye el informe. Aún así, en otras zonas la Policía utilizó dinamita, gases lacrimógeno y balines para enfrentarse a los cooperativistas.

   Con respecto a estos hechos, la defensora del pueblo de La Paz, Teresa Subieta, que se encontraba en el lugar de los hechos, escuchó como la Policía se comunicaba por radio que, tras haber terminado las existencias de gases lacrimógenos, iban a utilizar balines.

   Aunque se había ordenado el repliegue policial, horas antes de la muerte de Illanes, los enfrentamientos entre los mineros y la Policía continuaban. El informe incluye que se observó a un grupo de jóvenes, entre los 15 y los 20 años, que "lanzaban dinamita, se acercaban a la Policía lanzándole dinamitas, hacían movimientos tácticos para cercarla. Y la Policía lo que hizo fue replegarse. Se replegó sistemática, tácticamente. En ese repliegue hubo refriegas porque había mineros que intentaban acercarse a los policías".

POLICÍAS ACUSADOS

   El pasado 27 de octubre, Tezanos identificó a siete de los policías implicados en el uso de armas de fuego el día del fallecimiento de Illanes: "Por portación de arma letal se identificó a los siguientes miembros de la Policía Boliviana: el Comandante Departamental de Policía - La Paz, Cnl. José Luis Araníbar; el Cnl. Juan Carlos Flores Flores; el Tcnl. Richard Gustavo Olivares Coss; el My. Juan Carlos Vega Gareca; el My. Juan Javier Salgueiro Hurtado; el My. Yoshiro M. Armentia Escobar; y Walter Laguna Saavedra, con armas de calibre 9 mm".