SANTIAGO, 10 Sep. (EUROPA PRESS) -
Miembros de la Gendarmería chilena expulsaron por la fuerza de la cárcel de Temuco, en la región de Araucanía (centro), a cuatro diputados que habían acudido al centro penitenciario para sumarse a la huelga de hambre que realizan desde hace dos meses 34 presos indígenas mapuches para exigir al Gobierno de Sebastián Piñera la derogación de la Ley Antiterrorista, un vestigio de la dictadura del general Augusto Pinochet (1973-1990).
Los cuatro diputados, pertenecientes a la Comisión de Derechos Humanos, se resistieron a ser desalojados del interior del centro penitenciario e incluso se aferraron contra las rejas para evitar su expulsión, según imágenes mostradas por los medios locales.
Después de ser sacados por la fuerza, los diputados atribuyeron la acción policial a una supuesta orden emitida por el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter.
"Nos sacaron de la celda en que estábamos, primero se nos pidió conversar y se nos emplazó a desalojar. Nosotros no quisimos y después llegaron decenas de gendarmes y nos sacaron por la fuerza", indicó el diputado Hugo Gutiérrez, del Partido Comunista (PC).
"La situación es triste, porque hemos tenido la oportunidad de sentir el lamento del pueblo mapuche, de sentir la molestia que tienen con un Estado que los maltrata y deja en la completa indefensión", añadió.
Por su parte, el legislador Sergio Aguiló, del Partido Socialista (PS), señaló el peligro que corren los presos mapuches por su ayuno y advirtió de que "si fallece alguien el Gobierno va a ser el culpable".
En la misma línea, Gutierrez calificó de "inaguantable" la situación de los indígenas mapuches y dijo que los presos que protagonizan el ayuno "están dispuestos a morir en la huelga de hambre porque no es tolerable como están viviendo", informó en su edición digital el diario 'El Mercurio'.
En un comunicado, la Gendarmería defendió su actuación señalando que los cuatro diputados habían accedido al recinto "en calidad de visitantes" y que posteriormente manifestaron su intención de "quedarse permanentemente más allá del horario de visita permitido por el reglamento".
"De acuerdo a nuestro ordenamiento jurídico, sólo pueden permanecer y pernoctar en los establecimientos penitenciarios, las personas cuyo ingreso haya sido ordenado en virtud de una resolución judicial. Por consiguiente, toda persona que visite a un interno, sea que éste se encuentre en prisión preventiva o condenado, debe respetar los horarios y modalidades vigentes de visitas", añadió el comunicado.