La RASD reclama "no premiar el expansionismo" y reitera que la "única solución" es el plan de paz impulsado por la ONU
MADRID, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
La República Árabe Saharaui Democrática (RASD) ha expresado su "profunda decepción" con Reino Unido por su apoyo al plan de autonomía presentado por Marruecos para Sáhara Occidental y ha recalcado que "ninguna organización internacional" reconoce la soberanía de Rabat sobre este territorio, aún pendiente de descolonización.
El Ministerio de Exteriores de la RASD ha señalado en un comunicado que Londres "deja claro que no reconoce ninguna soberanía por parte de Marruecos, el Estado ocupante, sobre Sáhara Occidental", si bien ha incidido en que lamenta que un país "miembro permanente del Consejo de Seguridad (de Naciones Unidas)" haya dado su respaldo a la propuesta de Rabat, "alejándose de su postura sobre Sáhara Occidental, un asunto de descolonización en la agenda de la ONU desde 1963".
Así, ha hecho hincapié en que "la única solución fundamentada en compromisos, práctica y razonable es el Plan de Arreglo de la ONU y la Unión Africana (UA), aceptado por ambas partes en 1988 y aprobado por unanimidad por el Consejo de Seguridad en 1990 y 1991", según ha recogido la agencia saharaui de noticias SPS.
De esta forma, ha incidido en que "la 'propuesta' propagada por Marruecos es un engaño y una maniobra colonialista cuyo objetivo es 'legitimar' la ocupación ilegal de Sáhara Occidental y privar a su pueblo de su derecho inalienable a la autodeterminación y la independencia", antes de argumentar que respaldar el plan de Rabat es "inconsistente" con la posibilidad de impulsar a ambas partes a participar en un proceso encabezado por la ONU.
La cartera ha explicado que los apoyos al plan de autonomía "sólo provocan que el Estado ocupante mantenga su intransigencia, causa subyacente del bloqueo en el proceso de paz de la ONU", por lo que ha trasladado a "todos los actores realmente preocupados por la estabilidad en el norte de África" que "una paz duradera no puede lograrse premiando el expansionismo y la anexión de territorios por la fuerza".
En este sentido, ha expresado su deseo de que Reino Unido "use su influencia para impulsar un proceso de paz significativo y encabezado por la ONU que permita al pueblo saharaui ejercer su derecho a la autodeterminación e independencia de forma libre y democrática, sin ataduras militares y administrativas".
RECLAMA IMPULSAR EL PROCESO DE PAZ
Por último, ha reiterado la disposición del Frente Polisario a "participar de forma positiva en un proceso de paz liderado por la ONU" y a "contribuir de forma constructiva a lograr una solución pacífica y duradera a la descolonización de Sáhara Occidental, la última colonia en África".
"Mientras tanto, (el Frente Polisario) subraya la determinación y compromiso inamovible del pueblo saharaui a la hora de lograr sus aspiraciones nacionales legítimas de liberad e independencia", ha zanjado el Ministerio de Exteriores de la RASD, encabezada pro el propio Frente Polisario desde su proclamación en febrero de 1976.
El comunicado ha sido publicado después de que el ministro de Exteriores británico, David Lammy, expresara el domingo su apoyo al plan de autonomía marroquí al considerarlo como "la base más creíble, viable y pragmática para arreglar el contencioso" sobre este territorio, según un comunicado firmado por él mismo y su homólogo marroquí, Naser Burita.
La postura de Londres se suma al apoyo dado durante los últimos años por los gobiernos español y francés al plan de autonomía marroquí, un cambio de postura calificado de traición por el Polisario, que recuerda además que España es aún 'de iure' la potencia administradora del Sáhara Occidental. Estados Unidos también respalda el plan de autonomía marroquí y en 2020 Donald Trump firmó el reconocimiento de la soberanía marroquí sobre el territorio en disputa.
La antigua colonia española del Sáhara Occidental fue ocupada por Marruecos en 1975 pese a la resistencia del Frente Polisario, con quien se mantuvo en guerra hasta 1991, cuando ambas partes firmaron un alto el fuego con vistas a la celebración de un referéndum de autodeterminación. Las diferencias sobre la elaboración del censo y la inclusión o no de colonos marroquíes ha impedido hasta el momento su convocatoria.