CIUDAD DE MÉXICO, 7 Sep. (Notimérica) -
El volcán Popocatépetl, situado en el centro del país, se podría convertir en la última esperanza de Ciudad de México, una zona condenada al hundimiento como consecuencia de la extracción continuada de agua que ha provocado un problema hidráulico.
Según ha señalado 'Forbes', Ciudad de México consume unos 50.000 litros de agua por segundo, cuestión que provoca que la ciudad se hunda más de 2,5 centímetros al mes, tal y como ha confirmado la Agencia Espacial Europea (ESA).
Para solucionar esta situación, un ingeniero mexicano, Manuel Frías, ha propuesto utilizar la energía del volcán activo Popocatépetl para evitar el colapso de la ciudad como consecuencia de la extracción de agua.
Este proyecto único sería el primero de México en utilizar la energía geotérmica, es decir, el calor interno que se genera a través del vapor.
Mientras tanto, algunos síntomas ya son evidentes en Ciudad de México, donde las grietas y socavones se reparten por el área metropolitana, que cuenta con más de 20 millones de habitantes. Además, Frías también ha señalado que los problemas en la Línea 12 de metro podrían ser consecuencia del consumo de agua.
UN PROBLEMA QUE PODRÍA EMPEORAR
La construcción de nuevas infraestructuras en la ciudad, como el Nuevo Aeropuerto de Ciudad de México, podría empeorar la situación, ya que multiplicaría la demanda de agua.
Sin embargo, Frías, que ya se enfrentó a un problema similar en un viaje a la antigua Unión Soviética, propone desarrollar un plan en dos fases.
La primera, la creación de una presa en el río Chuazingo que bombee el agua a Ciudad de México a través de un acueducto. El vapor que genera el volcán permitirá que la cuenca de la presa se recargue con frecuencia y no será necesario obtener el agua del subsuelo de la ciudad.
La segunda, el Proyecto Geotérmico Popocatépetl (PGT), que captaría el vapor que se encuentra debajo del volcán para su uso a nivel industrial.
ENERGÍA DEL VOLCÁN
Tres turbogeneradores permitirían convertir la energía geotérmica del volcán en electricidad sin la necesidad de utilizar hidrocarburos o cualquier otro elemento contaminante.
Aunque la inversión inicial es alta, de unos 200 millones de dólares para las turbinas y entre 2.000 y 3.000 millones de dólares para la presa, la electricidad generada podría abastecer al menos a un 50% de la zona metropolitana.