Publicado 18/01/2016 13:48

Las posibles relaciones del Gobierno argentino con el narcotráfico

Thai policemen search the home of a suspected drug dealer during a pre-dawn raid
DAMIR SAGOLJ / REUTERS

   BUENOS AIRES, 18 Ene. (Notimérica) -

   El final de la fuga de los tres presos más buscados de Argentina ha sido todo un éxito para el recientemente estrenado Gobierno de Mauricio Macri, ya que ha supuesto un gran desafío para esta administración en materia de delincuencia y narcotráfico, que apenas contó con 15 días desde el momento de la huída.

   Ya durante la pasada campaña electoral este gobierno trataba el tema del narcotráfico y lo postulaba como una de las tres prioridades que llevaría a cabo cuando llegase al poder. Y parece que poco a poco la administración va cumpliendo poco a poco los objetivos prometidos, como el levantamiento del cepo del dólar, la desclasificación de la información relacionada con el 'caso Nisman' y la captura de los tres prófugos han sido algunas de sus promesas ya cumplidas.

   No obstante, la fuga de la cárcel y la posterior 'excursión' de los presos por el país levantaron muchos interrogantes sobre las relaciones del Gobierno argentino con el narcotráfico. La captura de los delincuentes ha puesto de relieve la existencia de estas relaciones con fuerzas de seguridad y algunos sectores del Poder Judicial, según afirmó la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, tal y como recogió el diario argentino 'La Nación'.

   Según ha recalcado el citado medio, estas relaciones no fluirían con tal facilidad sino fuera porque existe una protección que viene directamente de las altas esferas de la política.

   Un claro ejemplo es el de Aníbal Fenández, exjefe del Gabinete de Gobierno de la anterior presidenta del país, Cristina Fernández de Kirchner, que presuntamente está involucrado en una investigación sobre tráfico de efedrina, una sustancia esencial para fabricar éxtasis o metanfetamina. Según señala La Nación, estas acusaciones provienen de importantes exfuncionarios de su propio gobierno.

   El antiguo Subsecretario del organismo responsable de coordinar las políticas nacionales de lucha contra las adicciones (Sedronar), Gabriel Yousef Abboud, declaró en el proceso contra Aníbal Fernández por tráfico de estupefacientes que éste siempre impidió resolver el problema de la importación de esa droga, que posteriormente era enviada a México por contrabando.

   Además, en una entrevista que el periodista argentino, Jorge Lanata, le hizo a uno de los tres prófugos, Martín Lanatta, el pasado mes de agosto para el programa 'Periodismo para todos', éste señaló a Aníbal Fernández como autor intelectual del triple crimen de General Rodríguez que supuso la muerte de tres empresarios de laboratorios farmacéuticos que importaban efedrina, para incorporarla luego al mundo de la droga.

   Todo esto pone en tela de juicio las relaciones de la política y la Justicia con el mundo del tráfico de drogas, que se llevan a cabo a través de las fuerzas de seguridad. Una vez capturados los hermanos Martín y Cristian Lanatta y Víctor Schillaci, surgen muchas cuestiones que podrían confirmar que esta complicidad es una realidad.

   El Servicio Penitenciario Bonaerense siempre ha estado bajo sospecha en relación a las estrechas relaciones con el narcotráfico. Los prófugos recorrieron gran parte de la zona sur de la provincia de Buenos Aires, visitando familiares y amigos, y según indican los investigadores creen que también hubo complicidad entre la policía y los tres delincuentes.