Actualizado 24/07/2012 09:36

El PRI acusa al Movimiento Democrático de financiar la campaña ilícitamente

 Andrés Manuel López Obrador
REUTERS


MÉXICO DF, 24 Jul. (EUROPA PRESS) -

El líder del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Pedro Joaquín Coldwell, ha acusado al Movimiento Progresista de financiar la campaña de su candidato a las elecciones presidenciales celebradas el pasado 1 de julio en México, Andrés Manuel López Obrador, con recursos ilícitos.

En una rueda de prensa, Coldwell ha aseverado que el Movimiento Progresista financió la campaña electoral de López Obrador con dinero público, lo que constituye una violación de la Ley Electoral, que prohíbe utilizar el dinero público con este fin.

Además, ha afirmado que el Movimiento Progresista superó el límite establecido por la legislación para el gasto electoral y que lo ocultó derivando parte del gasto a través de organizaciones sociales como Austeridad Republicana y Honestidad Valiente, entre otras.

"Se formaron de manera dolosa varias organizaciones civiles, de donde cobraban los miembros del equipo de López Obrador, y hemos detectado que algunos gobiernos estatales y locales les otorgaron contratos", ha denunciado, en declaraciones recogidas por el diario 'La Jornada'.

En tercer lugar, ha acusado a la coalición de izquierda de impedir que las autoridades electorales del país iberoamericano controlaran el origen y el destino de los fondos de la campaña electoral, unos 1.200 millones de pesos (72,8 millones de euros).

Por todo ello, ha instado al Instituto Federal Electoral (IFE) "a revisar cuánto entró en la campaña electoral de López Obrador" y ha solicitado que tras la sesión que celebrará el próximo jueves presente un primer informe sobre el avance de la investigación.

DENUNCIAS CONTRA EL PRI

La semana pasada, López Obrador, acusó al PRI de utilizar "recursos ilícitos", probablemente "recursos públicos o del crimen organizado", para financiar la campaña de su candidato presidencial, Enrique Peña Nieto.

Además, reiteró que, al margen de la procedencia de los recursos, el PRI gastó 4.200 millones de pesos (260 millones de euros) en la campaña electoral de Peña Nieto, cuando el límite legal son 336 millones de pesos (20,8 millones de euros), por lo que, al menos, cometió esa irregularidad.

Anteriormente, el Movimiento Progresista ha denunciado que el PRI compró cinco millones de votos regalando a los electores tarjetas telefónicas, bonos de supermercado y materiales de construcción a cambio de su apoyo en las urnas y que incluso hubo reuniones entre sus gobernadores para determinar cuántos votos debía comprar cada uno.