Actualizado 20/02/2015 12:45

La primera dama peruana, en el ojo del huracán

NADINE HEREDIA
Foto: MARIANA BAZO / REUTERS

LIMA, 20 Feb. (Notimérica) -

   La primera dama de Perú, Nadine Heredia Alarcón, está siendo investigada por dos delitos, presunto lavado de activos y corrupción, el primero había sido investigado y archivado en 2009 pero se han presentado nuevas pruebas esta semana, mientras que el segundo comprende los delitos de colusión, tráfico de influencias y asociación ilícita para delinquir en agravio del Estado y fue denunciado a inicios de febrero.

   En 2009, Heredia había sido investigada cuando su esposo, Ollanta Humala, todavía era líder de la oposición durante el Gobierno de Alan García (2006-2011), acusada de haber recibido más de 200.000 dólares entre 2006 y 2010. Sin embargo, el caso fue archivado al considerar que faltaban pruebas.

   Ahora, la Fiscalía de Lavado de Activos y Pérdida de Dominio está investigando de nuevo a Heredia por una denuncia de un ex militante del Partido Nacionalista, que preside su marido, en la que presenta nueva documentación que confirmaría que los ingresos de la primera dama durante 2006-2010 no procedían de dos empresas peruanas y una venezolana, como Heredia afirmaba, sino de su madre, hermanos y amigos.

   Este martes, la primera dama ha presentado un 'habeas corpus' (figura legal que previene las detenciones arbitrarias), contra la primera investigación, solicitando que se archive al considerar que "no hay pruebas nuevas, según ha publicado el diario peruano 'La República'.

   La segunda investigación es contra la administración pública y está a cargo de la Fiscalía para Casos de Corrupción de Lima, y comprende los delitos de colusión, tráfico de influencias y asociación ilícita para delinquir en agravio del Estado. En esta caso se indagará sobre el supuesto vínculo ilegal entre Heredia y el ex asesor de campaña de Humala en 2006, Martín Belaunde, que ha pedido refugio en Bolivia tras ser acusado de corrupción.

   En mayo del año pasado, Heredia ya estuvo en medio de la polémica cuando fue denunciada porque supuestamente el Gobierno de Perú espiaba a opositores que podrían perjudicar su eventual candidatura presidencial en 2016, algo que fue negado desde el ejecutivo.

   Recientemente, este enero, la primera dama también fue acusada de haber espiado a miembros del propio partido, después de que desde los medios de comunicación se apuntase a una conspiración contra la vice presidenta, Marisol Espinoza, y la primera ministra, Ana Jara. Supuestamente, el Gobierno habría ordenado a la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI) espiar a miembros del partido.

CRECIENTE PÉRDIDA DE POPULARIDAD

   Hace un año la popularidad de Heredia hacía que se perfilase incluso como una posible sucesora en la Presidencia, pero ahora pasa por su peor momento. Mientras en febrero de 2014 gozaba de un 40 por ciento de respaldo a su gestión, según un sondeo de la consultora Ipsos-Apoyo, ahora sólo tiene un 16 por ciento, la cifra más baja desde que su marido llegó al Gobierno en 2011, según ha publicado el diario peruano 'La Tercera'.

   Al descenso de popularidad, se suman las divisiones en el Partido Nacionalista, que se hicieron evidentes tras la derrota en el Congreso este enero, cuando se derogó la ley laboral juvenil, considerada como abusiva por la oposición  y que tanto Heredia como Humala defendieron hasta el final. Esto incrementó las presiones para un cambio de gabinete que se concretó este martes.

   La derogación de la norma hizo que la pareja presidencial perdiese la mayoría en el Congreso y reconocidas figuras del nacionalismo abandonaron sus filas. De hecho, ante las denuncias contra su esposa, Humala ha acusado a sus ex compañeros de partido de ser los responsables.