Publicado 06/06/2019 17:41

Putin llama "locos" a quienes apoyan a Guaidó como "presidente encargado" de Venezuela

Chinese President Xi Jinping visits Russia
-/Kremlin/dpa

   MADRID, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -

   El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha tachado de "locos" a quienes apoyan al autoproclamado "presidente encargado" de Venezuela, si bien ha subrayado que no tiene nada contra el líder opositor, incluso le considera "una persona simpática".

   "¿Están locos o no?", ha dicho Putin, en un encuentro con la prensa internacional que ha tenido lugar este jueves en el marco del Foro Económico de San Petersburgo, cuestionando la forma en la que el opositor venezolano llegó al poder, según informa la agencia de noticias Sputnik.

   Guaidó "es una persona simpática, estoy bien con él, soy neutral, pero si ponemos en práctica tal manera de llegar al poder --un hombre salió a la plaza, miró al cielo y se declaró jefe de Estado ante Dios-- (...) será un caos en todo el mundo", ha alertado. "Elijamos al presidente de la misma forma en Estados Unidos", ha planteado.

   Putin ha defendido además que Rusia tiene una posición neutral sobre la crisis venezolana. "Nosotros, en general, estamos en contra de la injerencia en los asuntos internos de otros países, consideramos que eso trae consecuencias muy graves, por no decir trágica, (...) El camino al infierno está empedrado de buenas intenciones", ha dicho.

   El jefe del Kremlin ha puesto como ejemplo de intervenciones fallidas en Libia e Irak, ambas propiciadas por Estados Unidas, una con el apoyo de Naciones Unidas y la otra mediante una coalición internacional. "Confirman perfectamente" mi teoría, ha sentenciado.

   En el caso de Venezuela, también se especula con una intervención militar. Guaidó ha señalado a la "cooperación internacional" como una vía, mientras que Estados Unidos ha reiterado que "todas las opciones están sobre la mesa", incluida la militar. Putin ha reprochado a la Casa Blanca que siga considerando a América Latina "su patio trasero".

   Washington, por su parte, ha criticado la presencia en Caracas de dos aviones militares con cien efectivos procedentes de Moscú. Rusia y Venezuela han explicado que obedece a los acuerdos bilaterales en materia de defensa. "Solo cumplimos con nuestros compromisos en el ámbito técnico-militar", ha insistido.

   El presidente estadounidense, Donald Trump, ha informado esta semana de que Rusia finalmente había retirado a su personal militar de Venezuela. Interrogado a este respecto, Putin ha contestado que "es posible" que algunos se hayan ido tras culminar su trabajo. "Algunos se fueron, algunos volvieron a llegar", ha apostillado.

   En cualquier caso, ha avanzado que, aunque "hace tiempo" que Rusia no vende armas a Venezuela, "conforme a los contratos debe prestar servicio de mantenimiento", por lo que le seguirá prestando ayuda en este sentido al menos hasta que expire su "compromiso".

   Putin ha abogado una vez más por "armarse de paciencia" y trabajar con "quien sea", la oposición y las autoridades, para resolver la crisis política en Venezuela sin recurrir al uso de la fuerza. El miércoles, en una declaración conjunta con el presidente chino, Xi Jinping, ya abogó por "un diálogo político inclusivo".

CRISIS POLÍTICA

   La crisis política en Venezuela se agravó el 10 de enero, cuando Nicolás Maduro decidió iniciar un segundo mandato que no reconocen ni la oposición ni gran parte de la comunidad internacional porque se basa en los resultados de unas elecciones presidenciales, las del 20 de mayo de 2018, que consideran fraudulentas.

   En respuesta, Guaidó se declaró mandatario interino el 23 de enero con el triple objetivo de "cesar la usurpación", crear un "gobierno de transición" y celebrar "elecciones libres". Ha sido reconocido por Estados Unidos, la mayoría de los países latinoamericanos y muchos europeos, incluido España.

   A raíz de la asonada militar del 30 de abril, la situación se ha complicado y Gobierno y oposición han accedido a mantener contactos exploratorios en Noruega con el propósito de reanudar un diálogo que se ha resistido estos años. De momento, no ha dado más resultado que el compromiso de las partes de seguir hablando.