Publicado 18/01/2021 19:45

R.Centroafricana.- Mueren dos 'cascos azules' de la MINUSCA en el sur de República Centroafricana

Militares de la Misión Unidimensional Integrada de Naciones Unidas para la Estabilización en República Centroafricana (MINUSCA)
Militares de la Misión Unidimensional Integrada de Naciones Unidas para la Estabilización en República Centroafricana (MINUSCA) - MINUSCA

MADRID, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -

Un militar gabonés y otro marroquí de la Misión Unidimensional Integrada de Naciones Unidas para la Estabilización en República Centroafricana (MINUSCA) han muerto este lunes en la región de Bangassou en una emboscada perpetrada contra el convoy en el que se desplazaban.

El incidente se ha producido a unos 17 kilómetros de Bangassou, en el sur de República Centroafricana, en un ataque perpetrado por milicianos de la Coalición de los Patriotas para el Cambio (CPC), aliados del expresidente Franois Bozizé, según denuncia la propia MINUSCA.

El Representante Especial del Secretario General de las Naciones Unidas en República Centroafricana y jefe de la MINUSCA, Mankeur Ndiaye, ha condenado "enérgicamente" este "cobarde ataque" y señala en particular a Unidad para la Paz en Centroáfrica (CPC) y a las milicias antibalaka.

"La MINUSCA trabaja con las autoridades centroafricanas para que los autores y cómplices de estos crímenes de guerra sean arrestados y rindan cuentas de sus actos ante la justicia", ha señalado Ndiaye.

La MINUSCA ha perdido a siete 'cascos azules' desde el inicio de la ofensiva de la CPC, "pero sigue comprometida con el cumplimiento de su mandato de proteger a la población civil y dar seguridad a las elecciones".

Los 'cascos azules' prosiguen las operaciones en Bangassou, una ciudad ubicada a 750 kilómetros al este de la capital, Bangui, atacada por los rebeldes el 3 de enero. El viernes la MINUSCA informó de que controla la localidad en su totalidad.

La CPC aglutina a numerosos grupos armados desencantados con la firma de los acuerdos de paz; rencor, según el Gobierno, aprovechado por el expresidente Franois Bozizé para organizar una ofensiva sobre la capital del país, Bangui, y tumbar a las autoridades por la vía armada.