LONDRES, 1 Feb. (Reuters/EP) -
El Gobierno británico ha lamentado este viernes que el Ejecutivo argentino haya decidido no sentarse a dialogar sobre la soberanía de las islas Malvinas si participan en estas conversaciones las autoridades de este archipiélago sudamericano.
"Estamos en desacuerdo con esa decisión", ha subrayado una portavoz del primer ministro británico, David Cameron, después de que el ministro de Asuntos Exteriores argentino, Héctor Timerman, rechazara el jueves reunirse con su homólogo británico en Londres por la participación en ese encuentro de las autoridades malvinenses.
Tras la negativa argentina, Reino Unido ha querido dejar claro que no habrá reuniones sobre soberanía si no participan las autoridades del archipiélago sudamericano. "La posición es que no estamos dispuestos a dialogar sin los habitantes de las islas Falkland sobre temas que afectan directamente a su status como territorio de ultramar británico o a su economía, entre otros temas", ha explicado la portavoz del Gobierno de Londres.
Reino Unido y Argentina se enfrentaron en una guerra en 1982 por la soberanía de las islas Malvinas, un territorio de ultramar británico con capacidad de autogobierno. Reino Unido se impuso en la guerra pero Argentina ha retomado sus pretensiones soberanistas después de que en 2012 comenzaran las prospecciones petrolíferas en sus aguas.
Referiéndose a los malvinenses como "colonos", Timerman dijo el jueves que sólo aceptará una reunión a nivel bilateral con Reino Unido e invitó a su colega británico, William Hague, a mantener un encuentro en Buenos Aires.
La portavoz de Cameron ha subrayado que las conversaciones sobre la soberanía de las Malvinas sólo pueden desarrollarse con la presencia de los malvinenses y ha explicado que Hague aún confía en que el canciller argentino cambie de posición. "Corresponde a las Falkland y a sus habitantes decidir cómo quieren gestionarse. Ellos eligen ser británicos y es su derecho de autodeterminación que está amparado en la carta de Naciones Unidas", ha afirmado.
Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores británico ha dicho en un comunicado que el Gobierno de Londres continúa "preocupado" por el "comportamiento" del Ejecutivo argentino en relación a los malvinenses.
En 2012, la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, conmemoró el trigésimo aniversario de la guerra de las Malvinas con el comienzo de una campaña diplomática para reclamar la soberanía de este archipiélago situado frente a la costa de su país.
El Gobierno británico se ha negado a iniciar conversaciones con Argentina sobre la soberanía de las Malvinas mientras no lo acepten los malvinenses, también conocidos como 'kelpers'. Los habitantes de este archipiélago no han mostrado signos de querer independizarse de Reino Unido y tiene previsto expresar su opinión en un referéndum que se celebrará en marzo de este año.