La Policía detiene a 18 manifestantes que habrían intentado entrar por la fuerza al Museo Nacional
MADRID, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -
Miles de personas se han concentrado este sábado en la capital checa, Praga, para manifestarse bajo el lema "República Checa contra la pobreza", pidiendo la dimisión del Gobierno por la falta de medidas para paliar la crisis económica y sus consecuencias en la sociedad, así como para exigir el fin del apoyo militar a Ucrania.
Los manifestantes, que han ondeado banderas checas, han acusado al gabinete del primer ministro Petr Fiala de no tomar medidas suficientes para combatir la inflación, ha informado la cadena CT 24.
Sin embargo, tras la concentración, parte de los participantes se han trasladado al edificio del Museo Nacional, en donde han exigido que se retire la bandera ucraniana y colgar una checa.
"Después del final de la manifestación, la situación se intensificó frente al Museo Nacional, donde repetidamente llamamos a los manifestantes a abandonar su intención de irrumpir por la fuerza en el museo", ha indicado la Policía checa.
Asimismo, han informado de que han arrestado a cerca de una veintena de manifestantes por desobediencia a la autoridad, mientras que dos agentes han resultado heridos.
El ministro del Interior, Vit Rakusan, ha condenado "el ataque violento al edificio" del museo y "el intento de derribar la bandera ucraniana", después de señalar que entiende "el miedo de la gente a la pobreza y la guerra".
"Manifestaciones violentas, como la que vimos al final de la manifestación, cuando algunos de los participantes intentaron derribar la bandera del edificio del museo nacional, son totalmente inadmisibles. Espero que los organizadores se distancien de estas manifestaciones de violencia", ha manifestado.
Asimismo, ha añadido que "da la impresión de que toda la llamada manifestación contra la pobreza era solo una tapadera para la provocación prorrusa". "Ciertamente no podemos ser tolerantes con tales manifestaciones", ha agregado.
Un grupo más reducido de contramanifestantes ha portado banderas ucranianas y de la OTAN, así como pancartas con lemas contra el presidente ruso, Vladimir Putin.