LONDRES, 17 Nov. (DPA/EP) -
El primer ministro británico, Boris Johnson, ha segurado este miércoles que "vale la pena considerar" enviar un avión con una "caja de efectivo" a Irán para saldar una deuda histórica de 400 millones de libras que Reino Unido mantiene con la República Islámica y ayudar así a la liberación de Nazanin Zaghari Ratcliffe.
El pago pendiente, relacionado con un pedido cancelado de 1.500 carros de combate Chieftain que se remonta a la década de 1970, se ha relacionado con las detenciones de la cooperante británico iraní Nazanin Zaghari Ratcliffe y otros ciudadanos con doble nacionalidad por parte de las autoridades de Teherán.
Johnson ha dado estas declaraciones ante un comité especial de la Cámara de los Comunes, después de haber sido cuestionado por el exministro de Asuntos Exteriores Jeremy Hunt sobre los obstáculos que habría para cancelar esta deuda, en un momento en el que las transacciones bancarias con Irán están bajo sanciones.
"Si no se puede recurrir a un banco para pagar, ¿por qué no podemos hacer lo que hizo el presidente (de Estados Unidos, Barack) Obama en enero de 2016 y llevar hasta Teherán una caja con efectivo y pagar esa deuda?" ha preguntado Hunt.
"Desde luego que vale la pena considerarlo, pero como ya sabe, hay dificultades en torno a ello. Es importante saber también que hay otras personas con doble nacionalidad de Reino Unido e Irán además de Nazanin que forman parte de la ecuación y hay que ser muy sensibles a sus necesidades también", ha explicado.
La intervención de Hunt, respaldada por otros titulares de Exteriores como Jack Straw y Malcolm Rifkind, se produce en un momento en el que el Gobierno británico está siendo presionado para saldar la deuda con Irán en un intento por poner fin así a la detención de Zaghari Ratcliffe, presa en el país persa desde 2016 acusada de conspirar para derrocar el Gobierno.
El pasado sábado, su esposo, Richard Ratcliffe, terminó una huelga de hambre que le había mantenido 21 días acampado a las puertas de la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores, como parte de sus intentos por que ella fuera puesta en libertad.
A principios, el viceministro de Asuntos Exteriores de Irán, Ali Bagheri Kani, aseguró que tras una reunión en Londres entre altos funcionarios de ambos países se había acordado la cantidad adeuda, aunque Reino Unido había planteado la cuestión de las "limitaciones a las interacciones bancarias", como consecuencia de las sanciones económicas lanzadas por la comunidad internacional contra Teherán.
Zaghari Ratcliffe, de 42 años y colaboradora de la Thomson Reuters Foundation, fue puesta en libertad vigilada en marzo tras cumplirse los cinco años en prisión a los que fue condenada por cargos de conspiración y espionaje. Sin embargo, poco después fue imputada con nuevos cargos de propaganda contra Irán por participar en 2009 en una manifestación frente a la Embajada británica en Londres.