LONDRES, 4 Sep. (EUROPA PRESS) -
Royal Bank of Scotland (RBS), entidad en la que el Gobierno británico mantiene una participación del 62,4%, provisionará entre 600 y 900 millones de libras esterlinas (664 y 996 millones de euros) adicionales en sus cuentas del tercer trimestre en relación con las reclamaciones de última hora recibidas por la comercialización inadecuada de seguros de protección de pagos (PPI).
"El volumen de reclamaciones recibidas durante el mes de agosto fue significativamente mayor de lo esperado, con un aumento adicional en los últimos días previos a la fecha límite del 29 de agosto de 2019", informó la entidad.
Hasta el pasado 30 de junio, el banco escocés había provisionado 5.300 millones de libras (5.864 millones de euros), de los que se han utilizado 4.900 millones de libras (5.421 millones de euros).
El supervisor británico del sector financiero, la Autoridad de Conducta Financiera (FCA), dio por cerrado el pasado 29 de agosto el plazo para presentar reclamaciones por seguros PPI, por las que los bancos del Reino Unido se han visto obligados a provisionar casi 50.000 millones de libras (alrededor de 55.200 millones de euros), según los datos recopilados por New City Agenda.