LONDRES, 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Reino Unido ha decido nacionalizar Northern Rail, el operador de la red ferroviaria que conecta las ciudades del norte de Inglaterra y que hasta ahora era propiedad de Arriva, la filial ferroviaria de la alemana Deutsche Bahn.
El Departamento de Transporte británico ha subrayado que la red ferroviaria del norte "no ha logrado brindar el servicio que los pasajeros necesitan y merecen". Por este motivo, pasará a ser de propiedad pública el próximo 1 de marzo de 2020.
"La red de Northern es enorme y compleja y algunas de las cosas que están mal no se van a arreglar de forma fácil ni rápida, pero estoy decidido a que los pasajeros vean mejoras reales y tangibles en toda la red lo antes posible", ha subrayado el secretario de Transporte, Grant Shapps, en un comunicado.
Entre las medidas que asumirá el Ejecutivo británico se encuentra la ampliación del número de trenes en servicio para incrementar la capacidad de Manchester y Leeds, así como alargar los andenes de 30 estaciones antes de primavera para permitir que trenes más largos puedan funcionar.
El Departamento de Transporte también ha afirmado que todos los trenes se limpiarán "en profundidad" y se revisarán los procesos de limpieza para "asegurar que los pasajeros experimentan el servicio que merecen, desde el primer tren hasta el último". Por otro lado, mejorarán la "fiabilidad" del servicio los domingos.
Durante los próximos 100 días, el Departamento de Transporte preparará un plan que revise "de arriba abajo" de todo el servicio, desde la gestión de las operaciones, los patrones de los trenes y la experiencia de usuario con el objetivo de que no quede "ninguna piedra sin levantar" para mejorar la infraestructura.
MANTENIMIENTO DE EMPLEO
El Ejecutivo ha subrayado que la decisión de nacionalizar el servicio no tendrá consecuencias en los empleados de Northern, ya que mantendrán sus puestos de trabajo, y que no habrá cambios en los precios de los pasajes.
De su lado, Arriva ha afirmado en un comunicado posterior que tenía una "visión clara" para la red ferroviaria del norte de Inglaterra, aunque ha atribuido a "factores externos" que su plan no se pudiera cumplir.
La compañía ha incidido en que los desafíos fuera de su control a los que han tenido que hacer frente no han tenido "precedentes", especialmente por los proyectos de infraestructuras retrasados o cancelados.
"Se necesita un nuevo plan que asegure el futuro de los servicios de tren de Northern. Por eso, entendemos la decisión del Gobierno", ha reconocido la filial de Deutsche Bahn. "Reconocemos que las mejoras generales del servicio no han llegado lo suficientemente rápido y que los pasajeros merecen algo mejor. Por eso, nos disculpamos de corazón", ha agregado la empresa.