Publicado 21/12/2019 04:16

R.Unido.- Los unionistas retrasan la formación de la nueva Asamblea de Irlanda del Norte hasta después de Navidad

MADRID, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -

Londres y Dublín han decidido interrumpir este viernes las conversaciones para restaurar el gobierno regional de Irlanda del Norte, después de que fuentes del Gobierno de Irlanda hayan confirmado ciertas reticencias por parte de los unionistas pro-británicos para llegar a un acuerdo antes de Navidad, con el que se buscaba poner fin a las disputas que durante los últimos tres años han mantenido los nacionalistas del Sinn Féin y el Partido Unionista Democrático (DUP).

Las conversaciones se retomarán a la vuelta de las vacaciones navideñas, con el secretario de Estado para Irlanda del Norte, Julian Smith, a la cabeza, tal y como ha señalado el periódico británico 'Financial Times'.

En caso de que no exista un acuerdo antes del 13 de enero, se tendrán que convocar nuevas elecciones, una situación que no resulta muy atractiva para el DUP, que perdió hasta diez asientos en la Asamblea tras las elecciones británicas de hace una semana y, en cierta forma, tampoco para el Sinn Féin, que se mantuvo en siete pero perdiendo uno en Belfast, ante el empuje del Partido Socialdemócrata y Laborista (SDLP) y el Partido de la Alianza de Irlanda del Norte.

Smith mantuvo conversaciones esta semana en Londres con representantes del DUP. Según el político conservador, la reunión fue "positiva" y se mostró convencido de que las negociaciones saldrían hacia adelante.

Sin embargo, el viceprimer ministro de Irlanda, Simon Coveney, confirmó esta semana tras las primeras reuniones que se podría haber llegado a un acuerdo antes de Navidad si no fuera por la postura mostrada por ciertas parte del DUP.

En ese sentido, desde el DUP se ha insistido en que no se ratificará un acuerdo de "solución rápida", puesto que desde un primer momento dejaron "claro" que al tratarse de un "partido sindicalista" querían ante todo "la estabilidad en Irlanda del Norte" y "no una Asamblea a cualquier precio".

El Ejecutivo norirlandés, uno de los pilares de los Acuerdos de Paz de 1998, quedó roto en enero de 2017 con la salida del Sinn Féin del mismo tras argumentar que sus socios del DUP no les estaban tratando como iguales. Los esfuerzos y llamamientos para que se forme un nuevo gobierno no han prosperado hasta ahora.

La situación estalló cuando el nacionalista irlandés Martin McGuiness dimitió como viceministro principal tras su desacuerdo con la jefa del Gobierno norirlandés, la unionista británica Arlene Foster, respecto a un controvertido programa energético.

Ambas partes han estado intentando llegar a un acuerdo acerca de asuntos como la ley de reconocimiento legal del irlandés en la región, la reforma del reglamento interno para bloquear legislaciones dentro de la Asamblea o políticas relacionadas con el legado que ha dejado el conflicto armado, que en mayor medida quedó resuelto tras los acuerdo del 'Viernes Santo' de 1998.

Por su parte, el primer ministro de Irlanda, Leo Varadkar, ha manifestado otra vez que desde Londres y Dublín existe una actitud "realmente" decidida para "hacer todo lo posible" en la unión de ambas partes con el fin de "obtener una administración inclusiva en Irlanda del Norte".

Varadkar ha explicado que si bien el DUP y el Sinn Féin deben estar incluidos al tratarse de "los dos partidos más grandes", el objetivo es también incluir a los pujantes SDLP y a la Alianza de Irlanda del Norte, pues "lo hicieron muy bien en las recientes elecciones", así como también a los unionistas del Úlster.