MADRID 5 Jun. (EUROPA PRESS) -
El tráfico ferroviario en la región rusa de Vorónezh, en el suroeste del país, se ha visto interrumpido este jueves por una explosión que las autoridades ya examinan como un posible acto de "terrorismo", días después de que dos puentes se derrumbaran en Briansk y Kursk por ataques atribuidos a Ucrania.
El gobernador de Vorónezh, Alexander Gusev, informó inicialmente de la paralización de varios trenes tras un "incidente" que había dejado "daños menores" en las vías, sin aludir a posibles causas.
Si embargo, el Servicio Federal de Seguridad (FSB) sí que ha confirmado en una nota posterior que dichos daños se debían a una explosión y sugirió que pudo ser intencionada, en la medida en que existen indicios para abrir una causa penal por un posible delito de terrorismo.
Según el FSB, un artefacto explosivo estalló "justo antes" del paso de un convoy. De hecho, ha señalado que la "actuación profesional" de la tripulación del tren impidió años mayores, incluidas "pérdidas humanas", ya que activaron el freno de emergencia.