MADRID, 14 Oct. (EUROPA PRESS) -
Efectivos del Ejército de El Salvador han bloqueado por cuarta vez el acceso a los archivos en los que podría haber información sobre la masacre de El Mozote, a pesar del pronunciamiento de la Corte Suprema del país, que concluyó el martes que las inspecciones en archivos militares son legales.
Esta vez han sido efectivos de la Fuerza Armada salvadoreña de la brigada de artillería Óscar Osorio, en San Juan Opico, los que han impedido al juez encargado de investigar lo sucedido, Jorge Guzmán, acceder a los documentos en cuestión.
Guzmán fue recibido por una oficial de servicio y una asesora jurídica que, tal y como informa el diario 'El Mundo', le indicaron que no había notificado su llegada y no permitirían su ingreso.
Posteriormente, la citada oficial señaló al magistrado que el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ya había hecho entrega de los documentos requeridos. El juez, por su parte, informó de que ningún documento supuestamente desclasificado por Bukele había llegado a su juzgado.
La Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de El Salvador concluyó el martes que las inspecciones en archivos militares son legales y no perjudican a las Fuerzas Armadas, después de que los militares impidieran a Guzmán en varias ocasiones el acceso a los documentos de El Mozote, masacre perpetrada en 1981 y en la que murieron casi un millar de civiles.
En este sentido, el juez ha recordado a la Fuerza Armada que debe someterse a las órdenes judiciales y, de forma paralela, insistió en que la investigación en curso tiene como centro a las víctimas.
El Ejército ya bloqueó el acceso a los archivos a finales de septiembre, tras lo que Bukele aseguró que desclasificaría "voluntariamente los pocos archivos sobre la masacre de El Mozote que no han sido destruidos".
Un informe de la Comisión de la Verdad de Naciones Unidas concluye que entre el 10 y el 13 de diciembre de 1981, soldados presuntamente pertenecientes al Batallón Atlacatl torturaron y ejecutaron a más de mil pobladores del caserío El Mozote y otros lugares cercanos, en el departamento de Morazán, a 180 kilómetros al noreste de la capital del país, San Salvador, en busca de guerrilleros.