Actualizado 25/03/2010 09:04

Santos, el gran favorito en las elecciones presidenciales colombianas

José Manuel Santos
REUTERS


BOGOTÁ, 25 Mar. (Reuters/EP) -

El ex ministro de Defensa colombiano y líder del derechista Partido de la U, José Manuel Santos, es el candidato favorito para hacerse con la presidencia de Colombia en las próximas elecciones del 30 de mayo, ya que cuenta con más de diez puntos sobre el segundo candidato, la dirigente del Partido Conservador Noemí Sanín, y en caso de que en primera vuelta no lograra bastantes apoyos para ser envestido presidente vencería a cualquiera de sus posibles rivales en segunda vuelta.

Los datos, provenientes de una encuesta realizada por la empresa Gallup y dada a conocer este miércoles, otorga a Santos el 34,2 por ciento de los votos en primera vuelta. Le siguen Sanín, con el 23,4 por ciento de los sufragios, y el ex alcalde de Bogotá, Antanas Mockus, líder del Partido Verde, que obtendría el 10,4 por ciento de los votos.

Tras ellos habría otros cuatro candidatos a mucha más distancia. Se trata del partido Polo Democrático, al que la encuesta otorga el 6,3 por ciento de los votos; la formación Cambio Radical, que se haría con el 6,2 por ciento de los sufragios; el partido Compromiso Ciudadano por Colombia, que alcanzaría el 6,1 por ciento de los apoyos, y el Partido Liberal, al que votarían el 5,1 por ciento de los colombianos.

Puesto que ninguno de los candidatos lograría superar la barrera del 50 por ciento de los votos en primera vuelta, sería necesario celebrar una segunda convocatoria electoral entre los dos candidatos más votados, que tendría lugar en junio.

En esta hipotética segunda vuelta la encuesta le otorga el 44,7 por ciento de los votos a Santos, sucesor político del actual presidente de Colombia, Álvaro Uribe, mientras que Sanín obtendría el 43,3 por ciento de los sufragios.

La encuesta, realizada entre los días 20 y 22 de marzo, en la que se consultó a 1.200 personas y que tiene un margen de error del 3 por ciento, parece reflejar el deseo de los colombianos por la continuidad de las políticas de Uribe, en especial con sus medidas de gran dureza contra guerrillas rebeldes como las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) o el Ejército de Liberación Nacional (ELN).