CIUDAD DE MÉXICO, 24 May. (Notimérica) -
El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, no ha estado presente en el encuentro que tenía programado con el canciller de México, Marcelo Ebrard, ayer en Washington. Con el argumento de que tenía que reunirse con el presidente, Donald Trump, Pompeo ha delegado en su secretario adjunto, John Sullivan, su presencia en la cita.
El objetivo del encuentro era que Ebrard presentase siete proyectos encaminados a llevar a cabo el conocido como 'Plan Marshall para Centroamérica' a través de un espacio económico que impulse el desarrollo de la región, atraiga inversiones y genere empleo y bienestar, con el fin último de solucionar la crisis migratoria.
Ya en el pasado mes de enero, Pompeo canceló un primer encuentro con Ebrard, después de que Estados Unidos se comprometiese en diciembre a invertir más de 10.000 millones de dólares en El Salvador, Guatemala y Honduras, por la crisis que afectaba a Venezuela.
En esta segunda ocasión el encuentro sí se ha producido, aunque en lugar de Pompeo quien acudió a la reunión fue el secretario adjunto del Departamento de Estado, John Sullivan. "Tuvimos una reunión muy útil, interesante. Hemos presentado en esencia lo que sería la estrategia mexicana respecto al Triángulo Norte que integran Guatemala, Honduras y El Salvador", ha apuntado Ebrand tras el encuentro.
La crisis migratoria ha provocado tensiones entre los Gobiernos estadounidense y mexicano, con la intención de Trump de construir un muro en la frontera de ambos países para impedir la llegada de personas procedentes de Centroamérica a su territorio.
Por su parte, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha tratado de mantener una buena relación diplomática con la Administración de Trump, desde su principio de no intervención en las políticas de otros Estados.
"Mañana voy a volver a plantear esto, así como todos los esfuerzos que está haciendo México, el socio número uno de Estados Unidos", ha afirmado Ebrard respecto a la reunión que prevé mantener este viernes con el secretario del Departamento de Seguridad Nacional estadounidense, Kevin McAleenan.