MADRID, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Corea del Sur, Chung Sye Kyun, ha asegurado este lunes que las autoridades emprenderán acciones legales contra todas aquellas iglesias que violen las medidas de seguridad impuestas para prevenir el contagio masivo del nuevo coronavirus.
En el marco de las medidas impuestas por el Gobierno siguiendo las directrices del Ministerio de Sanidad, las iglesias deben garantizar que se respeta la distancia de seguridad de al menos dos metros entre aquellos que acudan a rezar.
Sin embargo, algunas iglesias, como la de Sarang Jeil, en el norte de Seúl, han continuado con los servicios religiosos del fin de semana sin adherirse a algunas de las directrices señaladas, según informaciones de la agencia de noticias Yonhap.
Chung, por su parte, ha indicado que las medidas impuestas, entre ellas la prohibición de aglomeraciones y reuniones, deben imponerse sobre aquellas iglesias que han ignorado las directrices por el virus.
"Los actos de estas iglesias dañan gravemente la seguridad no solo de los individuos que acuden a ellas sino de las comunidades enteras", ha expresado antes de aclarar que el país vive una "situación de emergencia que se asemeja prácticamente a una guerra". "La gente no debe tomarse las órdenes del Gobierno como si fueran un farol", ha lamentado.
Así, ha pedido a los templos e instalaciones deportivas y de entretenimiento del país a suspender sus actividades durante quince días dado que las próximas semanas serán "críticas" para la población.
En el caso de que no se cumpla con las medidas, el Gobierno emprenderá acciones legales que incluyen el cierre de las instalaciones y la imposición de las pertinentes demandas por daños.
Las iglesias protestantes se han convertido durante las últimas semanas en pequeños focos de infección en el país a pesar de que la oleada de casos de coronavirus vinculada a la secta de la Iglesia de Jesús Shincheonji ha ido remitiendo.
La pandemia de coronavirus, cuyo epicentro se encuentra en la ciudad china de Wuhan, ha dejado en el país 111 muertos y cerca de 9.000 infectados por el momento.