Publicado 15/08/2021 13:09

Siria.- El Gobierno sirio y los rebeldes alcanzan un alto el fuego en una conflictiva región del sur del país

07 August 2021, Syria, Idlib City: Syrian children attend a small-scale Olympic-style event held for internally displaced children by volunteers of the Violet relief organization. The sports event is organized in conjunction with the Tokyo 2020 Olympic
07 August 2021, Syria, Idlib City: Syrian children attend a small-scale Olympic-style event held for internally displaced children by volunteers of the Violet relief organization. The sports event is organized in conjunction with the Tokyo 2020 Olympic - Anas Alkharboutli/dpa


BEIRUT, 15 Ago. (DPA/EP) -

Las fuerzas del Gobierno sirio y los rebeldes han acordado un alto el fuego de dos semanas en la conflictiva zona de Derá al Balad, en la provincia de Derá (sur del país) para aliviar la crisis humanitaria en la región.

El acuerdo ha sido alcanzado después de conversaciones con el Ejército ruso, gran aliado del presidente sirio, Bashar al Assad, según ha informado un portavoz de un comité de coordinación local.

Durante las últimas semanas, las fuerzas gubernamentales han bombardeado y se han enfrentado a los combatientes de la oposición en esta zona, el lugar de nacimiento de un levantamiento que estalló contra el gobierno de Al Assad en 2011.

Desde el 24 de junio, las fuerzas gubernamentales habían sitiado la ciudad, donde los rebeldes llevaban prácticamente rendidos desde 2018 tras llegar a un acuerdo con Rusia. Sin embargo, partes de la ciudad permanecieron bajo el control de la oposición.

El jueves, el Enviado Especial de Naciones Unidas para Siria, Geir Pedersen, expresó su preocupación por la violencia en el sur de Siria.

"El aumento de las hostilidades, que han incluido fuertes bombardeos y la intensificación de los enfrentamientos terrestres, han provocado víctimas civiles. Miles de civiles se han visto obligados a huir de Derá al Balad", según el enviado.

Pedersen advirtió que la situación allí es alarmante y que la población civil estaba sufriendo una grave escasez de combustible, gas para cocinar, agua y pan, así como de asistencia médica.