MADRID, 19 May. (EUROPA PRESS) -
El enviado especial de Naciones Unidas para Siria, Geir Pedersen, ha asegurado este martes que las partes en conflicto en el país han acordado reiniciar sus contactos en la ciudad suiza de Ginebra una vez que la pandemia de coronavirus lo permita, al tiempo que ha pedido "diálogo" entre Estados Unidos y Rusia para lograr una solución.
"Espero que podamos sentarnos otra vez en Ginebra, quizá en un futuro no muy lejano", ha dicho Pedersen durante un encuentro por videoconferencia con la prensa, antes de agregar que las partes han acordado acudir a Ginebra "tan pronto como la pandemia lo permita y se reinicien los vuelos internacionales".
Así, ha destacado que las partes han pactado además la agenda para estas reuniones y ha destacado que durante las últimas semanas ha estado en contacto "con el Gobierno, la oposición y todos los actores relevantes" para intentar el proceso político en el país árabe.
Pedersen ha destacado que los avances del comité constitucional creado para dar forma a la nueva Carta Magna del país "no resolverá el conflicto por sí solo", pero ha defendido que "creará confianza" entre las partes, entre las que existe una "profunda desconfianza".
"Necesitamos mayor cooperación internacional", ha manifestado el enviado especial de la ONU, quien ha incidido en que "Estados Unidos y Rusia tienen un papel clave", por lo que les ha pedido que "incrementen su diálogo y cooperación en lo relativo a Siria".
"Lo han hecho antes y pueden hacerlo de nuevo", ha apuntado, al tiempo que ha hecho hincapié en que el alto el fuego pactado en la provincia de Idlib "está en pie en gran medida" y que la zona se encuentra en "una calma relativa".
En este sentido, ha destacado que este hecho "es una buena noticia", si bien ha alertado de que "las hostilidades podrían reiniciarse, lo que tendría unas consecuencias devastadoras" para esta zona del país y para Siria en su conjunto.
El propio Pedersen defendió a última hora del lunes ante el Consejo de Seguridad de la ONU que una "confianza renovada" y "cooperación" entre los actores internacionales involucrados en el conflicto y los sirios pueden "desbloquear el progreso" hacia la paz en el país.
En 2015, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó por unanimidad la Resolución 2254, que contiene una hoja de ruta para un proceso de paz en Siria que incluye un calendario para conversaciones --impulsadas por Naciones Unidas-- entre el Gobierno y la oposición.
El enviado especial de Naciones Unidas reiteró por ello la necesidad de un enfoque cooperativo en este sentido, "que garantice la estabilidad, proteja a los civiles y respete plenamente el Derecho Internacional humanitario".
En cuanto a la COVID-19, Pedersen informó al Consejo de Seguridad de que, si bien aún no ha golpeado a Siria, hay preocupación porque "aún podría hacerlo. El coronavirus ha añadido una nueva capa a la grave situación económica que ha dejado en Siria una década de conflicto, con importantes aumentos de precios y escasez en los productos básicos.