Publicado 22/05/2020 08:00

Somalia.- La ONU dice que, pese al terrorismo, la plaga de langostas y la COVID-19, Somalia avanza para crear el Estado

Somalia.- La ONU dice que, pese al terrorismo, la plaga de langostas y la COVID-
Somalia.- La ONU dice que, pese al terrorismo, la plaga de langostas y la COVID- - 2016 GETTY IMAGES / ANDREW RENNEISEN - Archivo

MADRID, 22 May. (EUROPA PRESS) -

Naciones Unidas ha querido reconocer este jueves los esfuerzos que desde el Gobierno del primer ministro de Somalia, Hassan Khaire, se están haciendo, teniendo en cuenta "sus posibilidades" para avanzar en la construcción del Estado, pese al terrorismo de Al Shabaab, la reciente plaga de langostas y la crisis sanitaria provocada por la COVID-19.

Así lo ha expresado el jefe de la Misión de Asistencia de Naciones Unidas para Somalia (UNSOM, por sus siglas en inglés), James Swan, quien ante el Consejo de Seguridad de la ONU ha destacado que, a pesar de todas estas dificultades, Somalia avanza incluso para poder celebrar las primeras elecciones completas en 51 años.

"Las consecuencias de la pandemia de la COVID-19 son graves para Somalia, pero la nación del Cuerno de África está haciendo lo que puede con los recursos que tiene, incluso mientras mira hacia sus primeras elecciones directas en medio siglo", ha dicho Swam.

A su vez, ha señalado unos 2,6 millones de personas han sido desplazadas dentro del país, lo que las hace más vulnerables a la pandemia. Según el último balance ofrecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), Somalia cuenta con 1.502 casos y 59 muertes registradas por la enfermedad, que ya ha afectado a más de 5,1 millones de personas y ha provocado la muerte de más de 330.000 en todo el mundo.

"La COVID-19 también está teniendo un impacto económico severo, con la disminución de las remesas de la diáspora somalí y el Gobierno Federal proyectando una caída del 11 por ciento en el PIB este año", ha informado Swam.

A todo ello se suma, ha añadido, que antes de la crisis sanitaria global, más de cinco millones de somalíes ya necesitaban previamente asistencia humanitaria, a la vez que el país lidiaba con el terrorismo de Al Shabaab y una gran invasión de langostas que pone en peligro la producción de alimentos.

No obstante, Swam ha destacado que el Gobierno Federal "dentro de sus posibilidades" ha respondido rápido a la crisis sanitaria de la COVID-19, con el apoyo de los seis estados regionales que participan en las tareas de coordinación a nivel nacional, junto con otros organismos de la ONU.

"La familia de la ONU está trabajando para reforzar la respuesta del Gobierno", ha dicho Swam, quien a su vez ha mostrado la ayuda que la OMS y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) están llevando a cabo para "ampliar la capacidad de pruebas y hospitales somalíes" y, además, "proporcionar generadores de electricidad".

"La respuesta de Somalia se ve enormemente apoyada tras haber logrado el 25 de marzo entrar en la iniciativa de deuda de los Países Pobres Muy Endeudados (PPME), lo que le permite aprovechar el apoyo presupuestario adicional y otorgar financiamiento de instituciones globales", ha explicado desde Mogadiscio a través de videoconferencia.

Las próximas semanas, ha dicho Swam, "serán decisivas para determinar cómo procederá Somalia con sus primeras elecciones directas desde marzo de 1969" y ha pedido a los países de la región que estén listos para movilizar tanto el apoyo técnico, como los recursos financieros necesarios "para que se celebren con éxito estos históricos comicios".

AL SHABAAB SE RESISTE A UN ALTO EL FUEGO

En materia de seguridad, Swam ha lamentado que el grupo armado Al Shabaab se resista a secundar la llamada de alto el fuego que hizo el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, y que "sus operaciones terroristas continúen sin cesar"

No obstante, ha celebrado que las autoridades somalíes hayan logrado recuperar algunas de las áreas que han estado bajo el control del grupo terrorista, como la ciudad estratégica de Janale, liberada por el Ejército Nacional Somalí y la Misión de la Unión Africana en Somalia (AMISOM) el 16 de marzo.

Asimismo, ha mostrado su preocupación por la posibilidad de que los socios internacionales desaceleren la ayuda brindada a Somalia en materia de seguridad al tener que hacer frente a la pandemia de la COVID-19 en sus propios países.

Somalia arrastra desde hace décadas una grave crisis social, política y económica a la que ahora se le ha sumado el coronavirus. Con al menos 1.170 positivos y 52 fallecidos hasta la fecha por la pandemia, las organizaciones advierten de que el país apenas está comenzando a sufrir los efectos de un nuevo reto que podría tener consecuencias devastadoras, habida cuenta del frágil sistema sanitario local.

La Organización Mundial para la Salud (OMS) ha intensificado sus operaciones en Somalia, un país donde se estima que el 50 por ciento de los residentes de zonas urbanas y el 15 por ciento de los de áreas rurales tienen acceso a atención médica. La amplitud del país y la dificultad de acceso a algunas zonas añade más complicaciones a esta cadena de factores.