MADRID, 18 Dic. (EUROPA PRESS) -
Somalia se enfrenta a la peor plaga de langostas en 25 años que está afectando los pastos y las cosechas básicas de quienes viven en las zonas rurales del país, que ya sufre los estragos de la violencia del grupo yihadista Al Shabaab y las consecuencias de las graves inundaciones de este año.
Según ha alertado este miércoles la oficina en Somalia de la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO), ya hay unas 70.000 hectáreas infectadas de larvas e insectos adultos en Galmudug, Puntlandia y Somalilandia, que ya han provocado daños en cosechas y pastos también en Etiopía.
En total, la predicción es que los próximos seis meses unas 100.000 hectáreas necesiten intervenciones de control directo frente a esta plaga, lo que requerirá una mayor inversión en el plano institucional, de infraesctructuras y técnico de cara al próximo año, ha subrayado la FAO en un comunicado.
"Estamos hablando de una intervención a medio y largo plazo. El impacto de nuestras acciones a corto plazo va a ser muy limitado, pero podemos hacer la diferencia para apoyar los medios de vida y evitar consecuencias desastrosas mayores si actuamos ahora", ha subrayado el representante de la FAO en Somalia, Etienne Peterschmitt.
La agencia de la ONU, que pide 3 millones de dólares para la respuesta inicial, ha reconocido que la situación es mucho peor de lo que se anticipaba y se ha visto exacerbada por las intensas lluvias y el reciente paso del ciclón 'Parwan'. De no ser atajada, la plaga de langostas se propagará a otras zonas del sur de Somalia, Yibuti, Eritrea y el noreste de Kenia, ha prevenido.
La FAO ya está trabajando con el Ministerio de Agricultura somalí y otras organizaciones en los esfuerzos de vigilancia y control en Somalilandia y Puntlandia para evitar que la plaga se siga extendiendo hacia el sur y el centro del país.
Además, se ha comenzado a fumigar con biopesticidas en Somalilandia. "Dada la escala del desastre, la fumigación aérea usando aviones habría sido una medida de control ideal. Sin embargo, las condiciones de seguridad en buena parte de Somalia no lo permiten", ha lamentado Peterschmitt.