Publicado 13/09/2019 14:00

Sudáfrica.- HRW reclama a la Policía de Sudáfrica que actúe contra los autores de ataques xenófobos a migrantes

MADRID, 13 Sep. (EUROPA PRESS) -

Human Rights Watch (HRW) ha reclamado a la Policía de Sudáfrica que actúe contra los autores de ataques xenófobos a migrantes de otros países africanos que, desde finales de agosto, han dejado doce muertos y miles de desplazados.

La organización no gubernamental ha denunciado que los responsables de las anteriores olas de violencia xenófoba, como la registrada en 2008 que acabó con la vida de 62 extranjeros o los ataques este año a camioneros inmigrantes, no han sido procesados por sus crímenes.

"Los círculos viciosos de violencia xenófoba son impulsados por una falta de control efectivo para proteger a los extranjeros y a sus propiedades", ha dicho el director de HRW para el sur de África, Dewa Mavhinga. "Denunciar la violencia xenófoba no es suficiente para frenarla, la Policía debe investigar en profundidad, arrestar y llevar ante la Justicia a los responsables", ha recalcado.

El ministro de la Policía de Sudáfrica, Bheki Cele, ha dicho a los medios que durante las últimas semanas se ha detenido a más de 600 personas por cargos relacionados con violencia en las calles, daños a comercios y daños personales graves.

HRW ha expresado su preocupación ante la posibilidad de que vuelva a imperar la impunidad y la última ola de ataques xenófobos no sea suficientemente investigada por la Policía, como sucedió con anteriores olas de ataques racistas.

El 3 de septiembre, el presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, publicó un vídeo en Facebook en el que condenó duramente la violencia xenófoba en el país y hacía un llamamiento a acabar con los ataques cuanto antes.

La organización de Derechos Humanos ha documentado varios episodios de violencia xenófoba desde finales de agosto contra inmigrantes de otros países africanos y sus comercios en las ciudades de Durban, Pretoria y Johannesburgo y en sus zonas periféricas.

En Johannesburgo la violencia comenzó el 1 de septiembre, con grupos de personas manifestándose en las calles al grito de "extranjeros iros a casa", utilizando el término denigrante para referirse a ellos, Makwerekwere.

La ministra de Defensa, Nosiviwe Mapisa-Nqakula, ha asegurado que diez de los doce víctimas mortales eran ciudadanos sudafricanos, aunque no ha ofrecido detalles sobre quiénes eran ni cómo murieron. Human Rights Watch no ha podido verificar la declaración de la ministra.

La organzación ha constatado que dos de los fallecidos eran hombres zimbabuenses. Uno de ellos no ha podido ser identificado ni se ha acalarado la causa de muerte y el otro, Isaac Mabandla Sithole, fue apedreado y quemado vivo por una multitud el 5 de septiembre, según HRW. La viuda de Sithole ha informado de que tienen un hijo de tan solo 6 semanas.

El embajador de Zimbabue en Sudáfrica, David Hamadziripi, confirmó el 11 de septiembre a la organización de defensa de los Derechos Humanos la muerte de los dos hombres zimbabuenses e indicó que se está trabajando para repatriación voluntaria de 170 personas. El martes, el Gobierno nigeriano anunció el envío de aviones a Sudáfrica con capacidad para transportar a 640 personas de vuelta a Nigeria.

HRW ha denunciado que el Gobierno no hace lo suficiente para poner fin a estas olas de ataques racistas. El 25 de marzo el Ejecutivo aprobó un Plan de Acción Nacional para combatir la xenofobia que aún no ha entrado en vigor.

"Cuando no se condena a los atacantes, otros no se verán apartados de la idea de perpetuar los ciclos de violencia xenófoba", ha dicho Mavhinga. "Sudáfrica debe priorizar y garantizar la seguridad de las víctimas y que los culpables sean condenados", ha concluido el responsable de HRW.