MADRID 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha alertado este martes de que 26.000 personas se han visto obligadas desplazarse durante los últimos días debido al recrudecimiento de la violencia en El Fasher, la capital de Darfur Norte, por lo que ha expresado su "profunda preocupación" por la grave situación a la que se enfrentan los civiles, que se ven "atrapados en una ciudad con pocas opciones a su alcance".
La portavoz de ACNUR en Puerto Sudán, Jacqueline Wilma Parlevliet, ha indicado que existen indicios de que las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) están "provocando el miedo entre las familias que sobreviven al asedio y al conflicto".
"Los civiles tratan de huir del terror y atraviesan puestos de control militar, arrestos arbitrarios, saqueos, acoso y graves violaciones de sus Derechos Humanos cuando tratan de buscar seguridad", ha lamentado, según un comunicado en el que ha advertido de que muchos testimonios apuntan a una situación humanitaria "alarmante".
En este sentido, ha denunciado que la "crisis de seguridad está recrudeciéndose rápidamente", lo que ha suscitado aún más desplazamientos en Darfur Norte, donde está previsto que muchos huyan de cara a los próximos días y semanas, también hacia la frontera con Chad.
ACNUR ha hecho hincapié en que existen numerosos casos de violencia sexual contra las mujeres y las niñas poar parte de grupos armados durante ataques en la zona, además de casos de ejecuciones arbitrarias. "Nos preocupan los grupos vulnerables, incluidas las personas con alguna discapacidad. ACNUR pide a todas las partes dejar de hacer uso de la violencia y de atacar a los civiles en las rutas de desplazamiento", ha apuntado.
Es por ello que ha reivindicado que los civiles "nunca deben ser un objetivo". "Se debe garantizar su traslado seguro", ha apuntado, al tiempo que ha instado a un "acceso humanitario seguro y sin limitaciones a la gente que lo necesita urgentemente". "Cumplir con el Derecho Internacional es una obligación, no una opción", ha añadido.
Además, ha manifestado que dado que las comunicaciones se encuentran "gravemente afectadas", ha sido "difícil obtener actualizaciones de los civiles que quedan en El Fasher", donde la inseguridad actual "sigue bloqueando el acceso, impidiendo la entrega de asistencia a quienes están atrapados sin alimentos, agua ni atención médica".
En Kordofán Norte se han registrado patrones similares de violencia y violaciones de Derechos Humanos tras la reciente caída de la ciudad de Bara, lo que ha provocado el desplazamiento de miles de personas dentro del estado, tal y como señala ACNUR, que prevé un posible "asedio" a la ciudad de El Obeid, que alberga a "miles de desplazados internos sudaneses, lo que agravaría aún más las necesidades humanitarias en la región".
Desde ACNUR, han insistido en que la crisis humanitaria en Sudán es la "mayor crisis de desplazamiento del mundo", y ha lamentado que únicamente está financiada al 27 por ciento. "Las necesiades siguen intensificándose", ha zanjado.