MADRID, 20 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Sudán del Sur, Salva Kiir, ha dejado entrever que podría formar el Gobierno de unidad nacional previsto en el acuerdo de paz sin el principal líder rebelde, Riek Machar, si este no regresa a Yuba antes de noviembre.
"Si el SPLM-IO que comanda Riek no quiere cooperar en la formación a tiempo del Gobierno de unidad en noviembre, seguiré adelante con otras partes que son firmantes del acuerdo de paz y formaré el Gobierno", dijo este jueves el mandatario en un acto nacional de paz y oración organizado por el Consejo de Iglesias de Sudán del Sur.
"Quiero que mi colega Henry Odwar traslade mi mensaje a Riek Machar de que necesitamos que venga Yuba", añadió, según informa Radio Tamazuj, en referencia al 'número dos' del partido del antiguo vicepresidente.
"Todos queremos que esté en Yuba, incluso si viene en octubre no tenemos ningún problema, lo vio cuando vino aquí que no había nadie contra él", añadió el presidente, en referencia a la visita que Machar hizo la semana pasada a la capital, donde se reunió con Kiir para analizar el proceso de implementación del acuerdo de paz firmado el 12 de septiembre de 2018.
El presidente reiteró que está comprometido con el acuerdo, que prevé la creación de un gobierno de unidad y la inclusión de los antiguos rebeldes en las Fuerzas Armadas como paso previo a ello, entre otras cuestiones. "Trabajaremos con los grupos de oposición que han firmado el acuerdo para asegurarnos de que no volvemos a la guerra", sostuvo Kiir.
Ante esta petición, Agok Makur, un alto cargo del SPLM-IO de Machar, ha asegurado este viernes en declaraciones a Eye Radio que su partido está comprometido con el acuerdo de paz, al igual que su líder, y que solo hablan de ello. "Nuestro lenguaje, palabras y pensamientos son sobre la paz", ha añadido.
Tras su encuentro de la semana pasada, Kiir y Machar expresaron su compromiso con cumplir con el objetivo de dotar al país de un Gobierno de unidad para el 12 de noviembre. Inicialmente, estaba previsto que este echara a andar en mayo, pero las partes acordaron aplazar su formación ante el retraso en la puesta en marcha de lo contemplado por el acuerdo de paz, en particular en lo relativo a la fusión de fuerzas.