MADRID, 13 May. (EUROPA PRESS) -
La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) de Naciones Unidas ha condenado este jueves el asesinato de un trabajador humanitario en Budi, en el sur de Sudán del Sur, y ha instado a las autoridades y a las comunidades locales que garanticen la seguridad del personal humanitario que opera en la región.
"Estoy consternado por este acto de violencia y envío mi más sentido pésame a la familia y compañeros del fallecido", ha expresado el coordinador humanitario en Sudán del Sur, Alain Noudéhou.
El miércoles 12 de mayo, la víctima falleció cuando el vehículo en el que viajaban, debidamente señalizado como parte del equipo humanitario, fue disparado por un grupo de delincuentes, relata el comunicado de la OCHA.
"El vehículo formaba parte de un equipo de organizaciones no gubernamentales internacionales y trabajadores sanitarios del Gobierno de Sudán del Sur que viajaban a un centro de salud" en el condado de Budi, un área que ha sufrido varias emboscadas en las carreteras este año, detalla el texto.
Noudéhou ha lamentado lo ocurrido y ha hecho un llamamiento al Gobierno "para que fortalezca la aplicación de la ley a lo largo de estas carreteras", pues "son una conexión vital entre las organizaciones humanitarias y las comunidades necesitadas".
"Debemos poder movernos con seguridad por todo el país sin miedo", ha recalcado Noudéhou. Se trata del primer trabajador humanitario asesinado en Sudán del Sur en 2021. El año pasado perdieron la vida por actos de este tipo nueve cooperantes.