Publicado 11/03/2020 19:58

SUST.- Islandia.- La Policía de Islandia eleva el nivel de alerta a "fase de emergencia" a causa del nuevo coronavirus

((Esta noticia sustituye a la anterior sobre el mismo tema, fechada el 7 de marzo. Disculpen las molestias))

MADRID, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Departamento de Protección Civil y Gestión de Emergencias de Islandia ha elevado el nivel de alerta a "fase de emergencia" tras detectar los dos primeros casos de nuevo coronavirus contraídos en el interior del país.

La decisión "no tiene un impacto significativo sobre la población", si bien supone que las agencias implicadas en la respuesta al virus que "incrementen sus actividades de preparación". Asimismo, no contempla medidas de restricción de movimiento.

El jefe de Epidemiología, Pórólfur Gudnason, y su equipo se están centrando en los grupos vulnerables, particularmente las personas de avanzada edad y aquellos con patologías previas.

Asimismo, los residentes en Islandia que llegan de zonas con un alto riesgo de infección tienen recomendado permanecer en cuarentena durante catorce días como medida de precaución, algo que se aplica también a aquellos que han estado en contacto con individuos infectados.

El superintendente de la Policía Vídir Reynisson ha recalcado además que la imposición de estas medidas "no significa que se vayan a prohibir las reuniones públicas", si bien ha agregado que "no se puede evitar decir que se acerca el momento de que eso ocurra".

En este sentido, ha asegurado que la prohibición de las reuniones públicas es probablemente "una de las medidas más efectivas" que pueden tomar para evitar el contagio del virus. "Aún no hemos llegado a ese punto, pero creemos que es inevitable que tomemos ese camino en algún momento", ha zanjado.

Las autoridades han destacado que se han adoptado medidas preventivas para evitar una expansión del virus en el país, donde se han detectado un total de 60 casos hasta la fecha, sin que haya habido fallecidos.

Reikiavik ha recordado que el país tiene pocos puntos de entrada y una de las densidades de población más bajas de Europa, lo que ha permitido moverse rápidamente a las autoridades para identificar, contactar y poner en cuarentena a los casos sospechosos.