RÍO DE JANEIRO, 2 Mar. (Notimérica) -
El escándalo de la trama corrupta de Petrobras está a punto de estrenar un nuevo capítulo: esta semana el procurador general de la República, Rodrigo Janot, desvelará la lista con los políticos que deben ser investigados por su vinculación con el caso, y a pocas horas de conocerse los nombres el ambiente entre la mayoría de partidos es de calma tensa.
Hasta ahora, todos los nombres que han sonado relacionados con la Operación Lava Jato han sido producto de confesiones a la Policía de delatores como el cambista Alberto Yousseff o el ex director de Abastecimiento de la compañía, Paulo Roberto Costa; por lo que los implicados se han escudado en que eran sólo declaraciones infundadas sin pruebas que les culparan.
En esta ocasión será diferente. La lista que presentará Janot, y que previsiblemente incluirá una treintena de cargos políticos, será una petición formal para que el Tribunal Supremo les investigue, aunque éste tendrá potestad para decidir si hay indicios suficientes para indagar o no.
Entre los nombres que probablemente aparecerán en la lista predominan los relacionados con el Gobierno (Partido de los Trabajadores, PT) y con partidos de su base aliada (principalmente el Partido del Movimiento Democrático de Brasil, PMDB).
Puede que integren la 'lista negra' cargos tan importantes como presidente del Senado, Renan Calheiros (PMDB), ex ministros como Edison Lobão (PMDB ) y Antonio Palocci (PT), senadores como Gleisi Hoffmann (PT) y ex gobernadores como Sérgio Cabral (PMDB). Hasta ahora todos ellos han negado cualquier implicación con el caso.
Un parlamentario que según el diario 'O Globo' no ha querido identificarse ha confesado que en estos días muy pocos están durmiendo bien en Brasilia: "Quien diga lo contrario está mintiendo. Hablo con algunos de ellos, por más que alguno que otro intente evitar el asunto. Es sólo una preocupación", ha asegurado.
Otro de los que podría aparecer citado por Janot es el presidente de la Cámara de los Diputados, Eduardo Cunha (PMDB), que recientemente quitó hierro al asunto remarcando la diferencia que hay entre petición de investigación y denuncia. "Si realmente sólo es investigación no pasará nada, hay unas 200 rodando en el Supremo", ha confiado.
En cualquier caso la presión sobre Janot y su lista es tal que hasta el ministro de Justicia, José Eduardo Cardozo, le advirtió la semana pasada de que su seguridad estaba en peligro y que había que aumentar las medidas de protección.
Pero Cardozo, a su vez, también se ha visto salpicado por la trama de Petrobras, ya que hace unas semanas se supo que se reunió en secreto con abogados de empresarios detenidos en la Operación Lava Jato por participar de sobornos. Ahora tiene diez días para dar las explicaciones pertinentes ante la Comisión de Ética Pública de la Presidencia.