MADRID, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los trabajadores de la salud de Zimbabue han suspendido este sábado cinco días de huelga no sin avisar de que reanudarán sus parones si el Gobierno no ofrece una propuesta salarial mejorada en dos semanas.
Miles de enfermeras y médicos de hospitales estatales se han plantado para pedir un aumento de los salarios debido al desplome de la moneda local y al crecimiento de la inflación.
"Los líderes de las Asociaciones de Salud han resuelto suspender temporalmente la acción industrial y solicitar a los trabajadores de la salud que reanuden el servicio", dijeron los líderes sindicales en una carta enviada a la Junta de Servicios de Salud del gobierno el viernes, recogida por el diario nacional 'News Day'.
"Esto se ha hecho para evitar más pérdidas de vidas. Los empleados esperan que el empleador presente de inmediato una oferta significativa, que aborde todos los asuntos planteados por los trabajadores", ha hecho saber uno de los organizadores, el doctor Tapiwanashe Kusotera.
Los trabajadores de la salud de Zimbabue se declararon en huelga el lunes después de rechazar una oferta de aumento salarial del 100% la semana pasada.
El presidente de Zimbabue, Emmerson Mnangagwa, ha anunciado este sábado un nuevo paquete de medidas, tan drástico como los anteriores, dirigidos a contener la inflación y al creciente costo de los productos básicos.
De momento, el Banco Central de Zimbabue planea duplicar el tipo de interés de referencia, que ya es el más alto del mundo, al 190%, según ha avanzado la integrante del comité de formulación de políticas monetarias del banco, Persistence Gwanyanya.
La intención, por encima de todos, consiste en desalentar los préstamos especulativos que están destruyendo la moneda local, con una inflación disparada en junio al 191,6%, sesenta puntos porcentuales más que en mayo.
El 17 de junio, el banco central prohibió a los bancos otorgar préstamos por debajo de la tasa oficial, actualmente en 80%, a partir del 1 de julio.
Las últimas medidas económicas anunciadas por Mnangagwa el 7 de mayo llevaron a la prohibición de todos los préstamos por parte de los bancos, culpados de provocar el colapso de la moneda local.