Publicado 01/03/2019 19:44

Turquía.- Turquía cesa a más de 165 militares por sus supuestos lazos con el clérigo Fetulá Gulen

MADRID, 1 Mar. (EUROPA PRESS) -

Las autoridades de Turquía han cesado este viernes a más de 165 militares por sus supuestos lazos con el clérigo islamista Fetulá Gulen, al que Ankara acusa de estar detrás del intento de golpe de Estado de 2016.

Las Fuerzas Armadas turcas han detallado que los afectados son 90 miembros del Ejército de Tierra y 77 de la Armada, al tiempo que han recalcado que la autorización ha sido firmada por el Ministerio de Defensa, según la agencia estatal turca de noticias.

"El Ministerio de Defensa y las Fuerzas Armadas continúa su lucha contra FETO --nombre que dan las autoridades a la nebulosa de seguidores y miembros del grupo de Gulen-- con determinación", ha dicho el titular de la cartera de Defensa, Hulusi Akar.

Así, ha manifestado que el Ejército se fortalecerá ante los intentos de los "traidores" integrados en el organismo.

La Fiscalía de Ankara emitió el lunes órdenes contra cien soldados --67 de ellos en activo--, un trabajador del Ministerio de Comercio y nueve trabajadores sanitarios, entre ellos la esposa de Tuncay Delibas, el médico privado de Gulen.

La decisión llegó apenas un día después de la detención de 224 militares en activo por sus presuntos lazos con Gulen. El sábado fueron emitidas órdenes de arresto contra 295 soldados.

El Gobierno turco culpa a Gulen, quien reside en Estados Unidos, de estar detrás del fallido golpe de Estado de julio de 2016. Gulen, que vive en el país norteamericano en un exilio autoimpuesto desde 1999, ha negado estar vinculado con la intentona.

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y Gulen eran aliados políticos hasta que la Policía y la Fiscalía, supuestos simpatizantes del clérigo, según el Gobierno turco, abrieron una investigación sobre corrupción en 2013 contra varios altos cargos del Ejecutivo.

Entonces, el mandatario turco acusó al clérigo de conspirar y erigir un Estado paralelo para derrocar al Gobierno con ayuda de la Policía y medios simpatizantes.

Desde el golpe, Turquía ha detenido a unas 160.000 personas y ha cesado casi al mismo número de funcionarios civiles, según estimaciones de la oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas. De esa cifra total, más de 50.000 personas han sido imputadas y han continuado en prisión durante sus procesos.

El alcance de la persecución de las personas vinculadas con la asonada ha alarmado a las organizaciones de Derechos Humanos y a aliados occidentales de Turquía, que han acusado a Erdogan de haber puesto en marcha una purga para acabar con todos los críticos con su gestión.