MADRID, 7 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía de Turquía ha presentado este jueves cargos contra más de cien personas, entre ellas el excopresidente del prokurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP) Selahattin Demirtas, por las protestas registradas en 2014 en el país en protesta por la postura de Ankara hacia la ofensiva de Estado Islámico contra la localidad siria de Kobani, de mayoría kurda.
Según las informaciones recogidas por la agencia estatal turca de noticias, Anatolia, los cargos han sido presentados contra 108 personas. La Fiscalía pide cadena perpetua contra 38 de ellas, sin que se haya especificado si Demirtas es una de estas personas.
Las protestas, que se saldaron con cerca de 40 muertos, tuvieron lugar entre el 6 y el 8 de octubre de 2014 por lo que los manifestantes denunciaban como una inacción del Gobierno turco ante la ofensiva. El Ejecutivo ha acusado al HDP a incitar estas movilizaciones.
Demirtas, quien fue presidente del HDP a la Presidenciales 2018, fue encarcelado desde 2016 a la espera de juicio por numerosos cargos de terrorismo contra él. El político fue condenado en septiembre de 2018 a cuatro años y ocho meses de cárcel por "propaganda a favor de una organización terrorista".
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) pidió el 22 de diciembre la "liberación inmediata" del político y recalcó que las autoridades habían violado numerosos de sus derechos durante la detención, algo que fue criticado duramente por el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
"El TEDH debe saber que ahora defiende a un terrorista así. Si no lo sabe, seguiremos diciéndolo", puntualizó el presidente turco, quien arguyó que el excopresidente del HDP "es culpable ante los ojos de la gente". "Es el asesino de Kobani, es el asesino de 53 jóvenes en Diyarbakir. Fue el que llamó a mis hermanos kurdos a salir a las calles y es responsable de su muerte (por la represión de las protestas por parte de las fuerzas de seguridad)", zanjó.
Las autoridades turcas han detenido a miles de personas durante los últimos años por sus presuntos lazos con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), incluidos destacados políticos del HDP --la tercera fuerza política del país-- que han sido imputados y juzgados por cargos de "terrorismo".
Por otra parte, el Ejército turco ha intensificado sus operaciones contra el PKK tanto en el país como en el norte de Irak --donde la formación cuenta con numerosas bases-- desde que quedó roto el alto el fuego entre el Gobierno y el grupo armado en julio de 2015.