MADRID 12 Ago. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, ha advertido al resto de socios de la Unión Europea del riesgo de "dar instrucciones desde el banquillo" para la próxima cumbre entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo de Rusia, Vladimir Putin, y les ha instado en cambio a comenzar a organizar un encuentro propio con el dirigente ruso.
De esta forma, ha justificado el hecho de que no haya suscrito este martes junto a los otros 26 jefes de Estado y de Gobierno de países de la UE un comunicado en el que se reivindica el derecho de los ucranianos "a elegir su propio destino" y la importancia de las sanciones contra Rusia.
Orbán ha apuntado que, antes de que "el coro liberal" comience a utilizar contra él el argumento de que es "la marioneta de Putin" en Europa, cree necesario aclarar los motivos por los que no se ha sumado al consenso, entre ellos que "la declaración intenta fijar las condiciones de una reunión a la que los líderes de la UE no están invitados".
"El hecho de que la UE haya quedado al margen ya es lo suficientemente triste de por sí. Lo único que puede empeorarlo es que empecemos a dar instrucciones desde el banquillo", alega el primer ministro húngaro en un mensaje en redes sociales.
Para Orbán, "lo único sensato" que pueden hacer ahora los líderes europeos pasa por empezar a organizar su propia cumbre con Putin, tomando como "ejemplo" la reunión impulsada desde la Casa Blanca. El dirigente de Hungría ya causó polémica en julio de 2024 al viajar a Moscú para verse con el presidente de Rusia, en un gesto que coincidía además con el arranque del semestre de presidencia húngara en el Consejo de la UE.
Además, el Gobierno húngaro se ha desmarcado de otras posiciones mayoritarias como el endurecimiento de las sanciones contra Rusia por la invasión de Ucrania o los avances en el proceso de adhesión ucraniano al bloque.