MADRID, 1 Oct. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de Ucrania han anunciado este martes la apertura de una investigación criminal contra el ex fiscal general Yuri Lutsenko por sus presuntos lazos con empresas de apuestas ilegales.
La Oficina Estatal de Investigación (SBI) ha indicado que la investigación se centra en la posibilidad de que Lutsenko cometiera abuso de poder, según ha informado la agencia ucraniana de noticias UNIAN.
La apertura del caso contra el antiguo fiscal ucraniano ha llegado a petición de David Arajamia, un destacado miembro del partido del presidente del país europeo, Volodimir Zelenski.
Lutsenko ha subrayado a través de un mensaje en su cuenta en la red social Facebook que "hace falta tener una imaginación rica" para formular semejantes acusaciones contra él.
El anuncio tiene lugar en medio de la polémica provocada por la conversación telefónica que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mantuvo en julio con Zelenski, y en la que, según consta en la transcripción, el mandatario estadounidense pidió a su homólogo que intercediese para investigar posibles abusos cometidos por el exvicepresidente Joe Biden, favorito en las primarias del Partido Demócrata para las elecciones de 2020.
El propio Lutsenko aseguró el lunes que Rudolph Giuliani --el abogado personal del presidente de Estados Unidos, Donald Trump-- le solicitó en varias ocasiones que investigara a Hunter Biden, el hijo del exvicepresidente estadounidense Joe Biden, y que se negó porque no había pruebas en su contra, por lo que le instó a que fueran las agencias de seguridad norteamericanas las que investigaran el tema.
En una entrevista concedida al diario 'Los Angeles Times', Lutsenko insistió en que, durante su mandato, no encontró pruebas de irregularidades cometidas por Hunter Biden o por Joe Biden y que trasladó ese extremo a Giuliani.
Lutsenko, que fue cesado en agosto por Zelenski, insistió en que emplazó a Giuliani a acudir a los tribunales si tenía pruebas de sus acusaciones y le dijo que no utilizara a Ucrania para llevar a cabo una venganza política que podría afectar a las elecciones presidenciales de Estados Unidos.