BRUSELAS, 26 Sep. (EUROPA PRESS) -
La comisión de Asuntos Jurídicos del Parlamento Europeo ha votado este jueves en contra de la designación como comisarios de la socialista rumana Rovana Plumb y del conservador húngaro László Trócsányi, llamados a ocupar, respectivamente, las carteras de Transporte y de Ampliación en la próxima Comisión Europea, al concluir que existe conflicto de intereses.
Ambos se han reunido a puerta cerrada con la comisión europarlamentaria para someterse a sus preguntas, después de los eurodiputados consideraran insuficientes las explicaciones que los candidatos presentaron por escrito para responder a las primeras dudas.
"Hoy hemos decidido que hay un conflicto de interés manifiesto y que dos comisarios no están capacitados para asegurar que cumplirán con las responsabilidades que implican las carteras", ha anunciado ante la prensa la eurodiputada de Francia Insumisa Manon Aubry, al término de la reunión.
Aubry, que ha confirmado que el resto de comisarios han recibido opiniones favorables, no ha querido adelantar las consecuencias de esta decisión, si bien ha apuntado que, "en la práctica, muy probablemente tendremos que examinar a nuevos comisarios, pero es pronto para decir qué es lo que pasará".
El visto bueno de esta comisión es un requisito previo inexcusable para que los comisarios candidatos puedan pasar a la siguiente fase del proceso, es decir, someterse a un examen oral de los eurodiputados antes de que la nueva Comisión en su conjunto se someta al voto del pleno de la Eurocámara.
El Parlamento europeo no puede tumbar a un único candidato, sino que debe dar o negar su consentimiento al Colegio de Comisarios en su conjunto, por lo que las reglas prevén en estos casos solicitar que se sustituya a los candidatos que plantean problemas.
Sin embargo, este proceso "no es automático", según ha subrayado una portavoz comunitaria tras conocerse la opinión negativa de la Eurocámara. "Esto significa que, por ahora, el proceso está suspendido, no que vaya a haber un cambio automático de candidatos", ha expresado la portavoz en una rueda de prensa en Bruselas.
Según el reglamento, si la comisión de Asuntos Jurídicos constata que se da el conflicto de intereses, procederá a emitir una serie de recomendaciones para corregir la situación, por ejemplo renunciar a los intereses económicos que motivan las dudas, cambiar de cartera o, en los casos más graves, que el presidente del Parlamento pida a la Comisión que tome medidas.
La Eurocámara tiene por interlocutor al Ejecutivo comunitario y no a los Estados miembros, según han apuntado fuentes parlamentarias, por lo que no le corresponde pedir directamente al Gobierno en cuestión que presente un nombre alternativo, aunque sí puede pedirle a la Comisión que lo haga.