El PPE tendrá que votar sobre la expulsión si lo piden siete partidos nacionales y ya lo han hecho al menos seis
BRUSELAS, 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los conservadores finlandeses del Partido de la Coalición Nacional han exigido este viernes que sea expulsado de la familia del Partido Popular Europeo (PPE) el Fidesz del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, por haber ido "demasiado lejos" con su campaña antieuropea dirigida especialmente a atacar al presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker.
El presidente de los 'populares' finlandeses, Petteri Orpo, ha enviado una carta formal al presidente del PPE, Joseph Daul, para "proponer la expulsión" de Fidesz de la familia europea, sumándose así a lo que ya pidieron el jueves otras formaciones como los partidos conservadores de Bélgica y Luxemburgo.
"Fidesz ha ido demasiado lejos. Existen motivos razonables y serios para concluir que Fidesz está incumpliendo los valores y principios del PPE", ha criticado Orpo, en un comunicado difundido para anunciar su posición.
"Los valores fundamentales comunes del PPE son la dignidad de la vida humana, la libertad y la responsabilidad, la igualdad y la justicia, la verdad, la solidaridad y la subsidiariedad. Sin una sociedad civil fuerte o una Unión Europea más fuerte, los valores fundamentales del PPE no se pueden implementar", ha añadido el político finlandés.
No es la primera vez que las políticas de Orbán en Hungría provocan malestar entre sus propios socios en Europa, ni que se evoca la posibilidad de su expulsión, pero en esta ocasión sus ataques al jefe del Ejecutivo comunitario, que también es miembro del PPE, ha hecho que las protestas se formalicen.
Budapest ha lanzado una campaña en la que acusa a Bruselas de impulsar políticas migratorias que "amenazan" la seguridad de Hungría, por ejemplo con la imposición de cuotas obligatorias de acogida de refugiados, y ha dirigido parte de los mensajes más duros hacia Juncker.
La Comisión Europea, que la semana pasada tachó de "ridícula" la campaña de "noticias falsas" del Gobierno húngaro, reaccionó de nuevo este jueves acusando al Ejecutivo de Orbán de "distorsionar la verdad" y pretender dibujar una imagen "oscura" sobre la política migratoria de la UE.
SI LO PIDEN SIETE PARTIDOS, EL PPE VOTARÁ SU EXPULSIÓN
Para que el PPE analice y vote la posible suspensión o expulsión de uno de sus miembros es necesario que así lo pidan al menos siete partidos integrantes de la familia europea, procedentes de al menos cinco Estados miembros.
Los conservadores belgas CDH (francófonos) y CD&V (flamencos) y los luxemburgueses del CVS también formalizaron el jueves su petición de que sea expulsado el partido húngaro, aunque según fuentes 'populares' consultadas por Europa Press el presidente del PPE tendría ya sobre la mesa al menos seis cartas.
Los partidos de centroderecha de Portugal, Países Bajos y Suecia también han dado señales de su malestar y se baraja que se sumen a la iniciativa formal que permita activar el proceso para expulsar al Fidesz.
Si se reúnen las siete misivas firmadas desde cinco países diferentes, el presidente del PPE tendrá que activar el proceso e incluir el asunto de la expulsión en la próxima Asamblea Política del partido europeo, que tendrá lugar el 20 de marzo.
Entonces se escucharían los argumentos de los representantes de Fidesz en la reunión y se sometería después al voto de los asistentes la decisión, que deberá ser adoptada por mayoría simple de los presentes.