BRUSELAS, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los gobiernos de la Unión Europea han acordado este miércoles las características del primer sistema comunitario de clasificación de inversiones verdes que sirva identificar aquellas que son sostenibles para el medio ambiente.
Esta taxonomía ha sido pactada entre los Veintiocho a nivel de embajadores, pero todavía debe ser negociada con el Parlamento Europeo, institución que ya aprobó en marzo sus líneas rojas de cara a estas conversaciones.
Según han establecido las capitales en su posición negociadora, este nuevo sistema de clasificación debe estar cerrado a finales de 2021 para que pueda aplicarse de forma completa un año después, a finales de 2022.
El objetivo de esta medida es reducir la fragmentación derivada de iniciativas de mercado y prácticas nacionales y acabar con el llamado 'greenwashing', por la que se comercian productos financieros como "verdes" o "sostenibles" cuando en realidad no cumplen con los estándares medioambientales básicos, ha explicado en un comunicado el Consejo de la UE.
De esta forma, el sistema de clasificación pactado por las capitales establece seis objetivos medioambientales, que son la mitigación del cambio climático, la adaptación al cambio climático, el uso sostenible y la protección del agua y los recursos marítimos, la transición a una economía circular, la prevención de la contaminación y la protección y restauración de la biodiversidad y los ecosistemas.
Así, para que una actividad económica sea clasificada como sostenible tendrá que contribuir "sustancialmente" a al menos uno de los seis objetivos anteriores, no dañar ninguno de los otros, ser desarrollada con salvaguardias mínimas en términos sociales y de gobernanza y cumplir con criterios técnicos específicos de supervisión.
La Comisión Europea asumirá la tarea de establecer la clasificación de dichos criterios para cada uno de los objetivos. Estos requisitos serán complementados con umbrales cuantitativos y cualitativos que tendrán que las actividades económicas tendrán que cumplir.
Bruselas ha celebrado este acuerdo y ha pedido tanto a los Estados miembros como al Parlamento Europeo que avancen rápido en las negociaciones para que el primer sistema de clasificación de inversiones verdes de la UE comience cuanto antes.
El vicepresidente del Ejecutivo comunitario responsable de Servicios Financieros, Valdis Dombrovskis, ha advertido de que la iniciativa pública no será suficiente para que la UE consiga descarbonizar su economía para 2050.
"Establecer un sistema unificado de clasificación de actividades económicas sostenibles es esencial para animar a los inversores a reorientar su capital hacia actividades económicas que sean realmente sostenibles y que nos ayuden a progresar hacia una economía neutra en material climática", ha defendido.