Tras cumplirse la promesa de las dos empresas y suspenderse los cortes de carreteras, mañana miércoles se reunirán Vázquez y Kirchner
MONTEVIDEO/BUENOS AIRES, 28 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno uruguayo agradeció ayer a las dos empresas europeas que proyectan la construcción de dos plantas de celulosa de papel en el municipio de Fray Bentos (departamento de Rio Negro), el 'gesto' de acceder a interrumpir por un periodo de 90 días las obras de construcción de las dos fábricas sobre el Río Uruguay, fronterizo con Argentina, para permitir que se realice un estudio de impacto ambiental, solicitado por el país vecino, y con el fin de que se produzca un encuentro, previsto para mañana miércoles, entre los presidentes de ambos países, Tábare Vázquez y Néstor Kitchner.
Según recoge esta mañana el diario 'ABC', Argentina teme que las fábricas de la española ENCE y de la finlandesa Botnia contaminen el río que separa a ambos países, mientras que Uruguay sostiene que las compañías "utilizarán tecnología limpia de última generación".
Botnia ya anunció el domingo que detenía las obras, aunque en la tarde de ayer los trabajadores de la planta aseguraban no tener constancia de que debieran dejan su trabajo. Por su parte, una delegación de la española ENCE viajaba ayer lunes a Uruguay para analizar la situación tras una invitación del Gobierno uruguayo al director de la planta, Emilio Rodríguez, con el que mantuvo una reunión a última hora de ayer en Montevideo.
"El Gobierno de la República desea agradecer públicamente el gesto de las empresas Botnia y ENCE para facilitar el diálogo entre los presidentes Tabaré Vázquez, y Néstor Kirchner", afirmaron desde el Poder Ejecutivo en un comunicado.
POR FIN, CUMBRE
Por su parte, el diario argentino 'La Voz del Interior' confirmaba esta mañana la cumbre Kirchner-Vázquez de mañana, tras darse ayer los últimos pasos para que se cumpliera la promesa de las empresas papeleras de detener temporalmente las obras e interrumpirse las protestas y los cortes de pasos fronterizos entre ambos países con el fin de "encaminar una solución al conflicto bilateral por la instalación de las dos fábricas de celulosa en el país vecino".
Néstor Kirchner y Tabaré Vázquez se encontrarán mañana a las 11:00 horas en la estancia Anchorena, residencia presidencial uruguaya de descanso, a 30 kilómetros de Colonia. La reunión se reducirá a los presidentes, sus cancilleres y sus jefes de gabinete, incluyendo un almuerzo posterior, que no estaba previsto en un principio, según confirmó anoche a este diario una fuente de la Casa Rosada.
La confirmación y algunos detalles del encuentro trascendieron tras un encuentro entre el jefe de Gabinete argentino, Alberto Fernández, y el secretario de la Presidencia uruguaya, Gonzalo Fernández, que tuvo lugar en Buenos Aires. Aunque los mandatarios tenían previsto reunirse por la tarde, la reunión se anticipó y se convirtió finalmente en un almuerzo en la embajada de Uruguay.
Gonzalo Fernández explicó que la última condición que quedaba por cumplir era que la empresa española ENCE siguiera los pasos que dio el domingo la finlandesa Botnia y anunciara también la suspensión de las obras de construcción de la planta de Fray Bentos durante 90 días.
"Si bien ENCE había asegurado que apenas realizaba movimientos de tierra, pudo saberse que en estos días pensaba contratar a 300 obreros para iniciar las obras", señaló esta fuente consultada por el diario.
La comisión encargada de realizar un estudio del impacto ambiental que tendrán las fábricas de celulosa servirá para que cada país designe a uno o dos expertos, por supuesto de otros países, con el fin de realizar una investigación conjunta, que sea "independiente" y que "dé todas las garantías", adelantó esta fuente.
El encuentro de mañana será así el primero de los dos, --el segundo, aún sin fecha, se hará en Mar del Plata, -- que acordaron Kirchner y Vázquez el pasado 11 de marzo, cuando se encontraron en Santiago de Chile con motivo de la toma de posesión de la nueva presidenta del país, Michelle Bachelette.
La reunión será posible finalmente porque por ambas partes se cumplieron las condiciones exigidas. Argentina reclamaba el anuncio formal de las dos papeleras de la suspensión de sus obras por 90 días, mientras que Montevideo pedía la finalización de los cortes que durante semanas impidieron el tránsito por los puentes que unen a Gualeguaychú y Colón con Fray Bentos y Paysandú, respectivamente.
Otro hecho que también contribuyó a la confirmación del encuentro fue el compromiso que asumió ayer mismo el ministro de Trabajo uruguayo, Eduardo Bonomi. Ante la preocupación de los 1.700 obreros de la construcción que trabajan en la planta de Botnia por la suspensión de las obras, Bonomi prometió que "no perderán los jornales". "En los próximos días veremos cómo se solventa esto", concluyó.