CARACAS, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
El líder de la Mesa de Unidad Democrática (MUD) --coalición opositora--, Henrique Capriles, ha rechazado las "amenazas de segundones", en alusión al llamamiento del vicepresidente venezolano, Nicolás Maduro, a respetar el dictamen del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) sobre la investidura presidencial de Hugo Chávez.
"Nos hacen gracia las amenazas de segundones. A ver si a partir de mañana se ponen a trabajar. ¡Gobierno paralizado!", ha escrito el líder opositor en su cuenta oficial de la red social Twitter (@hcapriles).
Capriles ha respondido así a Maduro que, durante el acto de solidaridad internacional con Chávez que se ha celebrado hoy en Caracas, ha instado a respetar el dictamen del TSJ, según el cual podrá tomar posesión del cargo ante el TSJ cuando esté plenamente recuperado, en lugar de ante la Asamblea Nacional el 10 de enero.
"Que nadie se confunda, ya habló el TSJ y todo el mundo tiene que decir santa palabra cuando habla el máximo intérprete de la Constitución, así no estemos de acuerdo", ha subrayado el también ministro de Exteriores de Venezuela.
Además, Maduro ha advertido de que "hay un plan de sectores de la derecha venezolana para buscar muertos y llenar las calles de sangre". "Creen que les llegó otra vez su hora loca, pero no se equivoquen, aquí hay instituciones, no se metan en aventuras golpistas", ha indicado.
Capriles también ha especulado sobre el estado de salud de Chávez al no intervenir desde La Habana, donde se recupera de la intervención quirúrgica a la que se sometió el pasado 11 de diciembre para que le extirparan un tumor cancerígeno, en el acto de solidaridad internacional.
"Por cierto, no dejaron hablar a Al Capone. ¿Qué habrá pasado?", ha cuestionado, en alusión al líder socialista. "¡Que vivan el Pueblo Venezolano y nuestra Venezuela!. ¡Nadie nos quitará el futuro!", ha añadido.
Por otro lado, ha considerado que el acto de solidaridad internacional convocado por el gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) ha sido un fracaso porque "la mayoría de los jefes de Estado (latinoamericanos y caribeños) no vinieron".
"Con los países que hemos tenido contacto (en la MUD) la respuesta ha sido unánime: Respetan el orden constitucional y no se prestan a un acto político del partido rojo", ha celebrado.