EEUU y Países Bajos rechazan haber violado el espacio aéreo venezolano
CARACAS, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
El ministro del Interior y de Justicia venezolano, Tareck El Aissami, confirmó este lunes la incautación durante la madrugada de un avión estadounidense vinculado al narcotráfico y que se suma a una segunda aeronave estadounidense incautada el pasado 2 de enero y también ligada al tráfico de cocaína, según Caracas.
"Estados Unidos nos culpa de tráfico ilícito de drogas y resulta que esta aeronave es de Estados Unidos e ingresó al espacio aéreo venezolano. Ellos son quienes realmente nos han embargado equipos para bloquear nuestra lucha contra sustancias ilícitas", denunció este lunes de madrugada.
El Aissami confirmó en rueda de prensa desde la Comandancia Aérea de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) la entrada ilegal de una aeronave King 300 con matrícula estadounidense en territorio venezolano procedente de Centroamérica, interceptada por dos cazas F-16 venezolanos y obligada a aterrizar en el municipio de Ortiz, en el estado de Guárico, en el centro del país.
El titular del Interior y Justicia lamentó que los tripulantes de la aeronave incautada rechazaron comunicarse con la torre de control una vez entrado en el espacio aéreo venezolano, motivo por el cuál fue inmediatamente interceptada y conducida a tierra.
Asimismo, informó de la incautación de otro avión estadounidense King 200 vinculado con el narcotráfico el 2 de enero, sin precisar más detalles sobre posibles cargamentos de droga transportados en su interior. La aeronave fue obligada a aterrizar en el municipio Pedro Camejo, ubicado en el estado de Apure, en el suroeste del país.
Las inspecciones iniciales efectuadas a las aeronaves indican que ambas han transportado cocaína. Ambas han sido puestas a disposición judicial y la tripulación todavía está pendiente de identificación, informó la agencia bolivariana de noticias.
El Aissimi informó de la detención de 17 personas y la incautación de 630 kilogramos de droga en lo que va de 2010 en distintas operaciones efectuadas en el conjunto del país y celebró la capacidad del Ejército venezolano para asestar golpes contra el narcotráfico.
"Hoy nuestra Fuerza Armada Nacional Bolivariana y las distintas organizaciones del Estado están fortalecidas en este sentido, y podemos decir que esto está reflejado en este tipo de acciones, con resultados positivos, que se realizan de manera soberana, lo que nos coloca como uno de los países que son ejemplo ante el mundo en lo que se refiere al combate del narcotráfico", aseguró.
En este sentido, celebró la reciente instalación de nuevos radares que cubren todo el territorio venezolano y recordó que la Asamblea Nacional tiene todavía pendiente aprobar la reforma de la Ley Orgánica contra el Tráfico Ilícito y el Consumo de Sustancias Estupefacientes y Psicotrópicas (Loctisep) propuesta el año pasado por el presidente, Hugo Chávez, y que, entre otros, incluye la posibilidad de derribar aviones vinculados al narcotráfico que sobrevuelen el espacio aéreo venezolano.
"Estamos en todo nuestro derecho soberano de tener una Ley que nos permita proceder de esa manera con los vuelos que violen nuestro espacio aéreo. Países en el Continente, como Brasil, Perú, Colombia y Estados Unidos, ya poseen leyes similares, ¿Por qué nosotros no"", subrayó el ministro.
Por su parte, el presidente de la Oficina Nacional Antidrogas (ONA), coronel Néstor Reverol, adelantó que espera la llegada, en el primer trimestre del año, de los primeros seis de los 18 aviones de reconocimiento K8 adquiridos a China. Se espera que todas sean entregadas en el 2010 y serán incorporadas a la lucha contra el narcotráfico.
PROTESTA OFICIAL
De hecho, el Gobierno de Caracas remitió este lunes sendas notas de protesta a las Embajadas de Estados Unidos y Países Bajos en Caracas para denunciar este tipo de incursiones después de que éstas fueran rechazadas desde ambas legaciones. El Ministerio de Exteriores venezolano convocó ayer al encargado de negocios estadounidense, John Caulfield, y al embajador holandés, J.G. van Vloten Dissevelt, para que le ofrecieran explicaciones.
Ante estos desmentidos, el vicepresidente venezolano y titular de Defensa, Ramón Carrizález, adelantó en rueda de prensa este lunes la presentación de pruebas de una supuesta violación del espacio aéreo venezolano por parte de un avión de patrulla con matrícula estadounidense procedente de la isla de Curazao, en las antillas holandesas, el pasado 8 de enero. Caracas dice que la nave violó dos veces el espacio aéreo venezolano antes de regresar a Curazao y ha remitido las pruebas tanto a Washington como a Ámsterdam.
"Esta plenamente demostrada la incursión de aviones de guerra provenientes de Curazao (...) Por el trazo de los radares no hay posibilidades de que los pilotos se hayan perdido o equivocado", insistió el vicepresidente.
"Queremos denunciar ante el mundo que se están produciendo incursiones en nuestro espacio aéreo, con la única intención de provocar una reacción de nuestro lado. Por ello hacemos esta denuncia con pruebas en la mano", concluyó.
Para sustentar las denuncias, el vicepresidente explicó que el piloto de la aeronave admitió a las autoridades que estaba violando el espacio aéreo venezolano, algo que se constata, dijo, tanto por la ruta empleada por la nave como las grabaciones de las conversaciones entre las torres de control venezolanas y de la isla caribeña.
Por su parte, el encargado de negocios estadounidense desmintió anoche que un avión de su país haya violado el espacio aéreo venezolano hace pocos días y aclaró que los hechos que han salido publicados en los medios de comunicación corresponden a una situación que se presentó hace dos años.
"Fui convocado por el canciller (Maduro) y me expresó su inquietud por lo que él llama una violación del espacio aéreo venezolano, pero yo le expliqué de acuerdo a la información que yo recibí de mi Gobierno no hubo ninguna violación y que las noticias que han salido son de un evento que ocurrió hace dos años que está expuesto en los medios como si hubiera ocurrido hace poco", matizó.
En este contexto, Caulfield recordó que este caso fue reconocido por el Gobierno de Estados Unidos en su momento sin que se hayan vuelto a producir incidentes de este tipo, al tiempo que agradeció a Maduro su disposición para dialogar y resolver el conflicto.